Las Islas Canarias se convirtieron, el pasado 21 de agosto, la primera comunidad autónoma en tener activa la aplicación RadarCOVID en todo el archipiélago, según han hecho saber las consejerías de Sanidad y Administraciones Públicas, Justicia y Seguridad, informan desde el Gobierno de la región insular en un comunicado.
La app, continúan, se encuentra integrada en el Servicio Canario de Salud y en los sistemas de información y gestión de la pandemia. De esta forma, durante los días posteriores a su puesta en marcha se procedió a definir la comunicación y la formación de los profesionales de los servicios de rastreo del virus en la autonomía, como uno de los pilares fundamentales en el éxito de la herramienta.
Una vez concluida, satisfactoriamente, la fase piloto, que se desarrolló en La Gomera entre el 29 de junio y el 31 de julio, y finalizar la de difusión de la aplicación efectuada en los días previos a su puesta en funcionamiento global, RadarCOVID ya se encuentra a disposición de la población de las Islas Canarias y de los turistas que acudan a la autonomía y puede utilizarse. Sin embargo, su operatividad plena se va complementando en los días posteriores a la entrada en vigor.
La aplicación funciona para averiguar cómo se mueve el virus en un territorio y para asegurar la seguridad de la población y los turistas, ya que pondrá a su disposición información al instante si el usuario ha estado en contacto estrecho con algún paciente que haya sido diagnosticado positivo por COVID-19 y lo haya notificado a RadarCOVID.
La app registra, de forma anónima y mediante un código encriptado, en el dispositivo los teléfonos de los posibles contactos que un afectado infectado haya podido tener en los últimos 14 días. Cuando se produce el diagnóstico, el personal de rastreo de COVID-19 contacta con el paciente para iniciar su labor. Así, se le realiza a la persona una encuesta epidemiológica y se le pregunta sobre si tiene instalada esta herramienta, o se le invita a descargarla, apuntan en la citada nota informativa.
Si la tuviera y quisiera usarla, se le otorga, en ese momento, continúan, un código emitido por el Servicio Canario de Salud; una vez que el paciente ha introducido dicho código en su móvil se genera un aviso a los teléfonos, de forma anónima, y se les indica que se pongan en contacto con la línea 900112061, en la que se valorará su caso. Si un usuario diera positivo, decidiría si quiere notificarlo, con lo que la población tiene la capacidad de prevenir la expansión del virus, subrayan. De esta forma, un mayor número de usuarios activos de la aplicación repercutirá en una mayor utilidad de esta para las autoridades, ya que RadarCOVID facilitará la reducción del impacto de nuevos contagios, contener posibles brotes y abordar, de forma eficaz, una posible cadena de transmisión.
La app emplea, informan desde el Ejecutivo de la autonomía insular, un modelo descentralizado, que se fundamenta en el protocolo denominado Decentralized Privacy-Preserving Proximity Tracing (DP-3T), que implica que únicamente son enviados al servidor los identificadores cifrados que emite cada teléfono, que los que recibe de otros terminales próximos. Cada determinado tiempo, los dispositivos descargan los nuevos identificadores de contagios confirmados para comparar con sus registros; así, el análisis de datos y de riesgo se realiza siempre desde el teléfono de la persona, y no desde un servidor, para asegurar la privacidad.
En este sentido, enfatizan, RadarCOVID contempla todas las garantías establecidas por la norma europea para preservar la privacidad de la población. Asimismo, garantiza la proporcionalidad y limita el empleo de datos personales. La utilización de este recurso será voluntario y se contextualiza dentro de los límites de la emergencia sanitaria, según el cumplimiento exhaustivo de las recomendaciones a este respecto de la Comisión Europea.
