La Junta de Extremadura entregó, en la jornada de ayer, una de las Medallas de la Comunidad, con motivo del día de la autonomía, al personal sanitario y sociosanitario por su trabajo y esfuerzo durante la pandemia de la COVID-19, en un acto en el que estuvo presente Guillermo Fernández Vara, presidente de la región, informan desde el Ejecutivo extremeño en un comunicado.
En este sentido, Azahara Antúnez, técnico en cuidados auxiliares de enfermería (TCAE) del Hospital Virgen de la Montaña, ubicado en Cáceres, y Carlos Martín, médico del Hospital San Pedro de Alcántara, también en la ciudad, fueron los encargados de recoger este reconocimiento, entregado por Alicia Cosma, voluntaria de la Cruz Roja.
Asimismo, la enfermera Cristina Blasco, también del Virgen de la Montaña, como representante de los colectivos premiados, junto con Florentino Blázquez, presidente de la Universidad de Mayores de Extremadura, como delegado de la sociedad civil, ha participado en este evento. Durante su intervención, Blasco ha destacado, según recogen en la citada nota informativa, que esta situación “ha puesto a prueba los cimientos de la sociedad extremeña”, subrayando, al mismo tiempo, que su abordaje ha sido “ejemplar, reaccionando desde el compromiso, la solidaridad y la responsabilidad”.
Así, Blasco ha continuado argumentado que este reconocimiento “es para toda la ciudadanía, para todas las personas que han pasado por la enfermedad, con el miedo que acarrea lo desconocido, para los que la superaron y para los que no pudieron. Por otra parte, la enfermera puso de manifiesto y agradeció el trabajo que han realizado todos los trabajadores y voluntarios, a los que calificó como “un excelente equipo humano que ha velado día y noche por el cuidado y la protección de todos”, señalan desde la Junta de Extremadura.
Entre otros colectivos galardonados, las Medallas de la Comunidad Autónoma recayeron en los docentes de la región, como distinción al trabajo efectuado durante los peores momentos de la pandemia; en el Operativo Alpha, integrado por 806 voluntarias de diversas localidades, por su labor de apoyo social a los sanitarios, que elaboraron 11.498 batas en 39 días; o en los trabajadores de las residencias de mayores de Extremadura. Además, apuntan desde la Junta, durante el acto se desveló un monumento en honor de las más de 500 víctimas de la COVID-19 y sus familias.
