La edición del pasado 8 de enero del Boletín Oficial del País Vasco (BOPV) ha hecho oficial la aprobación del proceso de acreditación para la prescripción enfermera, con lo que se regula la autorización para que los profesionales que trabajen en la autonomía puedan usar e indicar productos sanitarios y medicamentos de uso humano, tanto en el ámbito de la sanidad pública como de la privada.
Los requisitos establecidos para conseguir dicha acreditación, informan desde el portal web de Osakidetza en un comunicado, son haber cumplido un año mínimo de ejercicio profesional o, en caso contrario, aprobar un curso formativo gratuito elaborado por la autoridad administrativa sanitaria. En este sentido, de acuerdo con los datos ofrecidos por el Departamento de Salud del País Vasco, se calcula que el 98% de los profesionales enfermeros de la comunidad podrán acceder a la prescripción de forma automática, al contar con la experiencia solicitada.
Nekane Murga, consejera de Sanidad, ha querido poner de manifiesto, a este respecto, según señalan en la citada nota informativa, que con esta medida se pretende dar una mejor respuesta a las necesidades de la población, caracterizada por el envejecimiento y una mayor incidencia de las enfermedades crónicas y la dependencia, destacando el impulso que ha sufrido la profesión en los últimos tiempos, tanto en el terreno científico y de capacitación, lo que ha promovido su protagonismo a la hora de dar respuesta a estas necesidades.
Por otra parte, el Colegio de Enfermería de Gipukcoa ha emitido una nota de prensa en la que recogen las reacciones de las presidentas de las instituciones colegiales de las tres provincias vascas. Así, Hosanna Parra, de Álava, María José García, de Bizkaia, y Pilar Lekuona, de Gipuzkoa, han subrayado su satisfacción por la publicación de la medida, enfatizando en que “por fin es una realidad que tengamos un marco legal con el que poder seguir llevando a cabo lo que estábamos haciendo desde hace muchísimos años, pero ya de manera regulada y acreditada. Además, nos permitirá seguir afrontando como profesión los nuevos retos que deriven de la prescripción en forma de nuevas competencias”. Y recuerdan, además, que otro de los requisitos es la colegiación, por lo que animan “a todos a que se aseguren de que la tienen en regla para, así, garantizar la seguridad del paciente y la suya propia”, concluyen.
