En una lista de 22 profesiones, las enfermeras son las profesionales mejor valoradas por los ciudadanos estadounidenses en cuanto a “honestidad y ética personal”, según una encuesta Gallup, sondeo de opinión usado de forma habitual en los medios masivos para representar a la opinión pública. Así, las enfermeras se encuentran en el punto más alto de esta lista al recibir un 85% de calificaciones «altas o muy altas». Tras éstas, se encuentran farmacéuticos, médicos, dentistas y policías.
El punto más bajo de la lista lo ocupan los vendedores de automóviles, quienes han sido calificados como “honestos” solo por el 8% de los ciudadanos encuestados, un porcentaje muy similar al de los integrantes de la Cámara de Representantes (10%), los profesionales del área de la publicidad y los vendedores de acciones.
La calificación de los senadores tampoco es mucho mejor. Esta encuesta, que se realiza desde 1976, solo recogió en el período posterior a los atentados del 11 de setiembre de 2001 la evaluación positiva a los legisladores. Tras este período de tiempo, la opinión sobre los parlamentarios empeoró de nuevo. Con frecuencia, los cargos elegidos se enfrentan a investigaciones por violaciones éticas, relaciones adúlteras o malversación de fondos.
Tres de cada cuatro estadounidenses opina de forma negativa sobre el trabajo del Congreso, según un promedio de encuestas recientes realizado por la iniciativa RealClearPolitics.
