La importancia de la ‘Jornada de Puertas Abiertas’ de los hospitales para futuros residentes

Viernes, 6 de abril de 2018

por Natalia Hernández Manjón

Tras pasar el EIR, el sistema a través del cual los enfermeros españoles acceden a la formación especializada tras superar sus estudios básicos generalistas, los profesionales enfermeros se lanzan en búsqueda de la mejor opción, del mejor hospital que pueda cubrir todas sus necesidades. Leire Alcaide, futura residente en Madrid, terminó la carrera el año pasado y decidió sumergirse y lanzarse a la aventura en la difícil, pero no imposible, tarea del EIR, teniendo muy claro cuál era su sueño y a lo que quería dedicarse. “Desde que roté por el área de salud mental me encantó, fui muy pesada en la carrera para poder realizar las prácticas a esa área y me gustó mucho. En verano trabajé tres meses en el Hospital Infanta Sofía en Psiquiatría y tuve la suerte de que me cogieran, ahí podría ver si me gustaba de verdad. Una vez que se me acabó el contrato decidí dedicarme exclusivamente a la preparación”, explica.

Leire Alcaide junto a Ena Barrojo

Prepararse el examen no es una tarea sencilla pero hay varios métodos de ayuda que siempre pueden venir bien. Las opciones de las que se disponen son, en primer lugar asistir a una academia o, en segundo lugar hacerlo por cuenta propia. Esta segunda opción, aunque requiere una dosis mayor de responsabilidad, otorga una mayor libertad a la hora de organizarse los estudios, incluso puedes hacerlo online como con AulaEIR. Se trata de una plataforma online especializada en la preparación de esta prueba que proporcionará al estudiante todos los materiales y ayuda necesaria para prepararse y superar el examen. Leire pasó entre ocho y nueve horas en la biblioteca con lo que, sumado a su dedicación plena a este examen, logró aprobar y estar más cerca de su sueño. “Fue duro y hay momentos en los que dices que es imposible, que no lo vas a sacar, piensas que la gente está muy preparada o que a dónde vas si acabas de terminar la carrera. Yo salí disgustada el día del examen, pensando que me había salido fatal pero al final los resultados no fueron malos”, relata esta futura residente.

Tras superar este proceso comienza la fase de la especialidad donde todos tienen que cursar el sistema de residencia para elegir entre las especialidades de salud mental:   geriatría, pediatría, comunitaria, pediátrica, del trabajo o matronas. De este modo los enfermeros lograrán adquirir una formación específica que le acrediten un nivel superior de cualificación profesional y poder llegar a ser Enfermero/a Especialista.

Y es en este periodo cuando los diferentes hospitales realizan las conocidas ‘Jornadas de Puertas Abiertas’ para atraer a los mejores facultativos. En ellas los futuros residentes podrán conocer más en profundidad el hospital, las diferentes especialidades si aún no se han decantado por alguna, ver cómo trabajan el equipo, su material… “Con estas jornadas se le aporta a los futuros residentes información sobre cómo se desarrolla la residencia en el centro, qué oportunidades tienen, cómo está organizado el tema de la docencia…”, explica la enfermera de la Unidad de Psiquiatría y tutora del EIR, Ena Barrojo.

María Jesús Muñoz

El Hospital Ramón y Cajal celebró ayer estas jornadas en el salón de actos del centro, donde la Unidad de Docencia impartió a los diferentes enfermeros que asistieron charlas y mesas redondas con la participación de diferentes directores de Enfermería, Jefe de Estudios, Jefe de Residentes, e incluso aportaron la experiencia de anteriores residentes del hospital. “Los hospitales grandes en principio siempre están más demandados que los pequeños porque tienen muchos más servicios, tienen muchas más posibilidades de ver patologías y tipos de pacientes distintos. A este hospital se le caracteriza desde siempre, y sobre todo en Enfermería, porque le damos muchísima importancia a la investigación”, explica la Supervisora de Área, Docencia, Investigación y Calidad del centro, María Jesús Muñoz.

Una decisión como esta marcará todo su futuro, por ello es necesario tener en cuenta varios puntos antes de tomar la elección final del hospital y de la especialidad. “Dentro de enfermería lo más importante es que puedas escoger la especialidad que te gusta, aunque es verdad que muchas veces terminas haciéndola por descarte, te quedas con algo que no te llama la atención y luego resulta que sí te apasiona. Pero lo más importante del todo, es poder elegir lo que te gusta y luego el hospital que te ofrezca la posibilidad de cubrir con un notable alto todas las expectativas que te va a exigir luego la sociedad como profesional, elegir bien el lugar donde seas capaz de formarte”, argumenta María Jesús.

Según explica esta profesional, con estas jornadas los futuros residentes podrán hablar con los diferentes tutores y con otros compañeros residentes anteriores, conocer si hay parte de la rotación que no pueden realizar en el hospital… esos pequeños matices que ellos tienen en mente y que marcarán de un modo u otro su elección final. Leire Alcaide acudió a informarse tras conocer una página web donde los residentes compartían sus opiniones sobre los distintos centros. Así, ayer pudo conocer un poco más, barajar sus posibilidades, comprobar las críticas y despejar todas sus dudas.  Sólo espera una cosa a lo largo de esta nueva etapa: poder tocar todos los palos, las distintas unidades específicas que aún no conoce y con las que espera aprender bastante. “Estas jornadas me aportan las opiniones de residentes, me parece lo más objetivo y creíble poder tener a alguien que te de su opinión y te explique un poco cómo funciona la unidad, porque en Internet puedes sacar información pero no todo lo que puedes saber con este tipo de encuentros”, concluye.

Tanto Ena Barrojo como María Jesús Muñoz coinciden en la gran evolución que realizan los enfermeros en esta etapa gracias, en parte, a sus ganas de profundizar, de no quedarse sólo con el grado de Enfermería, de conocer más y mejor la especialidad que les gusta y donde tienen realmente la oportunidad de trabajar. “Empiezan con mucho miedo y con más inseguridades que conocimientos tienen. Tienen una evolución exponencial  y es que, no hay que olvidar que el residente no es un alumno, es un profesional más”, finaliza.

Aula EIR, EIR, enfermería, Hospital Universitario Ramón y Cajal, profesionales enfermeros, salud mental, trabajo

¿Quieres comentar la noticia?

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

*
*