Las migraciones internacionales de las últimas décadas han generado una gran transformación social, tanto a escala global como local. Las sociedades del siglo XXI son multiculturales, cosmopolitas y diversas, pero también desiguales, generan segregación, exclusión social y niegan cualquier alteridad y el reconocimiento del “otro”. La sociedad multicultural es una realidad que debemos definir en todos sus ámbitos, principalmente en el político, y también cómo se concreta en la vida cotidiana.
Una de las cuestiones fundamentales de la Universidad es la implicación y articulación de sus estudios con la sociedad. La Universidad, centro vital de la producción de saberes y conocimientos, tiene que avanzar en paralelo a la sociedad, pero también debe ser capaz de preparar a sus estudiantes para que puedan transformarla. Todas las instituciones deben involucrarse y, en este sentido, la Universidad juega un papel preponderante en la formación de ciudadanos.
La práctica enfermera se basa en el ejercicio de cuidar. La acción de cuidar es una constante universal con modelos o patrones particulares, actualmente en interacción. En el ejercicio de la profesión enfermera, en la relación que se establece con las personas de orígenes culturales diversos, la situación de partida es habitualmente de distancia y diferenciación entre “nosotros” y los “otros”. Se establece la comunicación a partir de nuestros códigos culturales y de las imágenes preconstruidas del “otro”, actuando con desconfianza y haciendo, en muchas ocasiones, una interpretación errónea. Los estudios universitarios de Enfermería tienen como objetivo formar a profesionales capaces de proporcionar cuidados holísticos a las personas y a la comunidad. Las Escuelas de Enfermería, entre otras competencias, tienen que formar a sus estudiantes para que sean capaces de conocer la diversidad de nuestro entorno social, analizar los principales problemas socio-culturales que se articulan en ella, integrar valores y actitudes positivas hacia la diferencia y adoptar la pluralidad como forma de convivencia y enriquecimiento personal.