Objetivo: aportar evidencias sobre los factores determinantes del síndrome metabólico iatrogénico derivado del uso de antipsicóticos de segunda generación.
Métodos: se llevó a cabo una revisión narrativa entre enero y febrero de 2020. Para ello se realizaron búsquedas bibliográficas en distintas bases de datos y plataformas: Pubmed, Science
Direct, Google Scholar y UpToDate. Se usaron las siguientes palabras clave (MeSH/DeCS): antipsicóticos (antipsychotic agents), antipsicóticos atípicos (atypical antipsychotics), síndrome
metabólico (metabolic syndrome), Enfermería (nursing), efectos adversos (side effects), salud mental (mental Health).
Criterios de inclusión: idioma español e inglés, publicaciones originales y a texto completo de los últimos cinco años, estudio en humanos.
Resultados: se seleccionaron 32 artículos. La evidencia establece la clozapina, olanzapina y paliperidona como principales antipsicóticos de segunda generación que favorecen el síndrome metabólico. Sería conveniente realizar controles antropométricos y bioquímicos: tensión arterial, peso, perímetro abdominal, índice de masa corporal (IMC), glucosa, HDL y triglicéridos. Se necesita un abordaje terapéutico multimodal para prevenir el síndrome metabólico, mejorar la educación sanitaria en estilos de vida saludable y considerar la polifarmacia homeostática.
Enfermería asume un rol destacado, mediante la utilización de herramientas de valoración centradas en farmacovigilancia, sexualidad y calidad de vida.
Conclusiones: se precisa el diseño de políticas sanitarias de calidad acordes con las expectativas y necesidades de la población psiquiátrica, promoviendo estilos de vida saludable y atención psicofarmacológica ante el elevado riesgo cardiovascular.
La Enfermería de Salud Mental se conforma como piedra angular en la atención, prevención, coordinación y el seguimiento comunitario del síndrome metabólico iatrogénico.