La tuberculosis es un problema de salud pública a nivel mundial, principalmente la Tuberculosis Pulmonar (TBP). El objetivo de este artículo es recorrer los aspectos más importantes de la prevención y control de la TBP, dirigidos tanto a la fuente (pruebas diagnósticas, especialmente la prueba de la tuberculina y la recogida de esputo; tratamiento farmacológico, insistiendo en la quimioprofilaxis primaria y secundaria, así como en la adherencia al tratamiento; control de contactos, con la estrategia de los círculos concéntricos; vigilancia epidemiológica y educación sanitaria, tanto a pacientes como contactos, así como las indicaciones del aislamiento respiratorio) como a las vías de transmisión (especialmente la vía aérea) y al huésped susceptible (vacuna BCG y protección de los contactos a través del uso de mascarillas y respiradores personales).
El trabajo de la enfermera debe dirigirse a todos los eslabones de la cadena epidemiológica, especialmente haciendo uso de la Educación para la Salud, en todos los niveles de prevención de la TBP.