El Hospital Universitario Río Hortega de Valladolid implantará en 2016 el sistema AMADEUS, que permitirá controlar si el paciente va a empeorar a través de los datos que se obtienen al monitorizarle: frecuencia cardiaca y respiratoria, saturación de oxígeno, presión arterial sistólica, nivel de consciencia, temperatura y oxígeno suplementario. A través de la evaluación de estos parámetros se podrá conocer de forma precoz el riesgo del paciente y, por ejemplo, modificar la periodicidad de la toma de constantes o generar una alarma para que los enfermeros trasladen al paciente al especialista o a la UCI.
La investigación lleva desarrollándose desde el año 2012 y ha contado con un año de prueba en el que se detectaron 300 alertas de diferente nivel y, entre ellas, 150 casos de intervención precoz. Gracias a estos resultados, se prevé que se beneficien de este sistema entre tres o cuatro pacientes a la semana.
Está basado en las aplicaciones informáticas usadas en la UCI así como en el programa Gacela, app de enfermería, y supone una extensión a todas las plantas de la instante vigilancia que ya se da en la Unidad de Cuidados Intensivos, por lo que se le conoce como “UCI sin paredes”.
La consejería de Sanidad de Castilla y León pretende que, poco a poco, se extienda a los demás hospitales de la Comunidad.
