“Aunque sería imposible poder abarcar todos los conocimientos, sí que resulta imprescindible que la enfermera generalista sepa un mínimo de radioprotección”

Jaume Roca Sarsanedas es enfermero de Radiología en el departamento de diagnóstico y tratamiento por la imagen en el Hospital de Sant Pau de Barcelona desde 1992. Ha participado como profesor colaborador en la Escuela Universitaria de Enfermería del hospital, como docente en múltiples jornadas, cursos y postgrados, así como socio activo en diversas asociaciones científicas. Actualmente colabora de director académico del Máster en Enfermería Radiológica de la Universidad de Barcelona y es presidente de la Sociedad Española de Enfermería Radiológica (SEER) y presidente de la Unión Española de Sociedades Científicas de Enfermería (UESCE).

Pregunta. ¿Cuáles son las funciones de un profesional enfermero dedicado a la Radiología?

Respuesta. Básicamente las mismas que cualquier otro enfermero, el cuidado de las personas que atendemos. Deberemos tener en cuenta dos factores principales: cómo afrontar los cuidados enfermeros dependiendo del procedimiento radiológico que se va a realizar y cómo afrontar este mismo procedimiento, según las características de salud del propio paciente. Muchas veces, al tener que actuar en estas dos vertientes se hace imprescindible la participación y colaboración en diversas actuaciones con nuestros compañeros de otras unidades, sobre todo si se trata de pacientes críticos, de manera que en estos casos podemos centrarnos en el procedimiento radiológico sabiendo que el paciente está controlado por su enfermera habitual. No ocurre lo mismo en pacientes agudos que no están ubicados en unidades de críticos o en procedimientos más intervencionistas, donde deberemos abarcar todos los cuidados en su globalidad.

Una de las labores menos reconocidas y que siempre llevamos a cabo casi de forma inconsciente es la función de “abogado” del paciente. Sabiendo qué procedimientos existen y cuáles son las necesidades del paciente con sus limitaciones, buscamos la mejor forma de proceder para evitar efectos secundarios indeseados que se pudieran ocasionar, lo que ahora se conoce como seguridad del paciente.

P. Los enfermeros pueden desarrollar su labor en el ámbito asistencial o técnico dentro de la radiología. ¿Cómo puede conseguir la acreditación que le faculte para dicha tarea?

R. Como en todos los campos de Enfermería es necesario la complementación entre el conocimiento técnico y asistencial para un cuidado integral del paciente. Incluso en Radiología el desconocimiento de la técnica y protección radiológica puede ser nocivo, ya que tiene unas características especiales que puede afectar directamente a la salud del paciente y del profesional.

En nuestro campo precisamos saber de la técnica y protección radiológica para realizar una perfecta labor asistencial enfermera y, por lo tanto, no diferenciamos labores técnicas de asistenciales, sino que todo es imprescindible para poder cuidar a las personas. Además, para poder manejar aparatos emisores de radiaciones ionizantes, el personal titulado sanitario (técnico, enfermero y médico) debe estar acreditado por el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN). Esta acreditación tiene diferentes niveles según la aplicación y la potencia de los aparatos.

P. ¿Qué tipo de cuidados de Enfermería se dan en los procesos radiológicos?

R. Los más destacados serían los cuidados enfermeros generalistas para pacientes críticos y agudos, sobre todo en casos de intervencionismo, de soporte al paciente en exploraciones complejas, la administración de radiofármacos y medios de contrastes por vía oral, rectal, intravenosos, intracavitario, etc., así como la propia obtención de imágenes diagnósticas en procedimientos dinámicos. En los casos concretos de tratamientos con radioterapia se hacen unos planes de cuidados muy completos para minimizar las complicaciones derivadas de la radiación, que dependiendo de la zona anatómica pueden producir muchos efectos secundarios.

También debemos comprender que atendemos a cualquier paciente que precisa una intervención diagnóstica o de tratamiento por la imagen que es la práctica totalidad de la población sanitaria. Por desgracia, cada vez se considera más necesario tener el soporte de un diagnóstico o tratamiento médico confirmado mediante una exploración radiológica, lo que nos aboca a no procurar solamente unos cuidados específicos de nuestra intervención directa, sino que debemos contemplar al paciente en toda su globalidad para evitar hacer un daño colateral.

Si nos centramos en los cuidados más específicos sobre los procedimientos radiológicos, una parte está directamente vinculada al aparataje que usamos y otra al propio paciente que debemos cuidar. Justamente la SEER ha patrocinado una primera investigación global para identificar las NICs más habituales según el procedimiento radiológico y los primeros resultados evidencian una necesidad de aplicar cuidados muy diversos y completos que no se pueden definir en dos líneas.

P. Los servicios de radiodiagnóstico y radioterapia llevan implícitos riegos asociados a la aplicación de radiaciones ionizantes con fines terapéuticos. ¿Qué precauciones ha de tener el/la enfermero/a?

R. Desde hace años, nuestros dosímetros personales apenas dan valores de exposición si se cumplen las normativas básicas de radioprotección y realmente las instalaciones están protegidas. Los que se encuentran más expuestos son los profesionales que trabajan en los departamentos de intervencionismo, hemodinámica cardiaca y medicina nuclear, ya que realizan su trabajo a la vez que se emite radiación, mientras que en el resto de procedimientos el personal puede retirarse a una zona segura antes de irradiar. Afortunadamente, la digitalización de los equipos detectores ha permitido aumentar su sensibilidad y, por lo tanto, ha disminuido la potencia necesaria para realizar estos procedimientos. No obstante, nunca debemos olvidar el entorno de trabajo y sus riesgos asociados a una continua exposición a radiaciones ionizantes.

P. El pasado mes de abril tuvo lugar el XVII Congreso Nacional de Enfermería Radiológica, ¿a qué conclusiones llegaron?

R. Precisamente los congresos es donde se dan a conocer las novedades para afrontar ciertos procedimientos. Podemos comparar diversas formas de proceder en problemas parecidos que aparecen en cualquier centro sanitario de España. Precisamente como principal objetivo la SEER está trabajando en el estudio que hemos comentado de identificación de las NICs que se realizan en los procedimientos radiológicos. En este congreso se han presentado los resultados preliminares con respecto a la identificación de los procedimientos en Radiología convencional, resonancia magnética, ecografía y tomografía computarizada. Ahora estamos terminado la fase de identificación en los procedimientos de tomografía por positrones y la gammagrafía; y se prevé la publicación del estudio para mitades del año 2016.

Como va siendo habitual en todos los congresos se ha identificado la necesidad de una formación básica en la carrera generalista. Aunque resulta imposible poder abarcar todos los conocimientos, sí que resulta imprescindible que la enfermera generalista sepa un mínimo de radioprotección, así como identificar imágenes anatómicas de radiología.

P. Si un profesional enfermero quiere dedicarse al área radiológica, ¿cómo se puede formar para ello?

R. Aunque sea de obligado cumplimiento, en la carrera de grado no se da mucha materia de Radiología, por lo que se hace imprescindible una formación complementaria.
Actualmente, como formación postgraduada está el Máster en Enfermería Radiológica, que imparte la Universidad de Barcelona con el soporte de la SEER.

Otra opción es cursar una formación de técnico superior en cualquiera de las especialidades médicas que se han establecido. Aunque sea una formación preuniversitaria, forma parte del espacio europeo de formación superior y pueden convalidarse muchas asignaturas comunes que se han realizado en Enfermería.