El documento «Indicadores Hospitalarios. Evolución 2010-2014», publicado por el Ministerio de Sanidad, revela, en sus indicadores, que el número de trabajadores con que cuenta la sanidad pública sufrió un descenso de 9.438 trabajadores en dicho periodo, en el que pasó de tener 471.661 a 462.223 empleados. Por otro lado, el sector sanitario privado aumentó en 6.698 trabajadores, de 81.107 a 87.805 en esos cuatro años.
De esta forma, la relación 
de altas hospitalarias y de gasto por cada 1.000 habitantes se encuentra en una situación semejante respecto a la diferenciación entre sanidad pública y privada. Según el Ministerio, la primera presenta un descenso generalizado de sus cifras, mientras que la segunda pone de manifiesto un ligero repunte en los dos ámbitos, destacando las cifras de gasto, que en el sistema público supuso un descenso de 90.995 euros por cada mil habitantes, pasando de 800.204 a 729.209 euros.
Sin embargo, la disminución del número de camas operativas es común para las dos ramas; en este aspecto, la pública contaba en 2010 con 115.426 y en 2014 con 109.435, perdiendo así 5.991 camas, y la privada pasó de 29.781 a 28.442, es decir, presenta un descenso de 1.339 unidades.
Por el contrario, en cuanto al número de hospitales, la sanidad pública muestra un crecimiento de 5 centros, logrando la cifra de 451 en 2014 frente a los 7 que perdió la sanidad privada, con 312.
