La apertura de un nuevo bloque quirúrgico en el Hospital Vall d’Hebron de Barcelona ha dado lugar a una indignación generalizada por parte del personal de Enfermería del centro debido a los cambios en las condiciones laborales que pretende realizar la dirección del hospital a raíz de su puesta en marcha.
En este hospital existen dos tipos de turnos para los enfermeros instrumentistas. Por un lado los que trabajan los días laborables de lunes a viernes y atienden actividad quirúrgica programada, y por el otro los que prestan servicios de Urgencia y trabajan en turnos de doce horas seguidas.
Los profesionales de quirófano ya están especializados a través de su formación, pero este último grupo tiene una experiencia “extrema” en las intervenciones urgentes. Con los cambios que se quieren llevar a cabo se pretende, por parte del hospital, que no haya esta separación, haciendo que todos los instrumentistas atiendan cualquier tipo de intervención, ya sea urgente o programada.
Los representantes de los trabajadores afirman que “estamos perdiendo la experiencia y la especialización de estas profesionales” y asegura que “cualquier enfermera dará una buena atención, pero el hecho de trabajar con una instrumentista con experiencia en uno de los dos tipos de intervenciones hace que el equipo entero pueda dar una mejor asistencia y evita posibles errores”.
Como protesta, el sindicato de Enfermería Satse, junto con las otras organizaciones de la Junta de Personal del Vall d’Hebron, han convocado una concentración de protesta el próximo día 29 de agosto a las puertas del hospital ya que consideran que la inauguración de las nuevas instalaciones “sirve de excusa a la dirección para reestructurar los calendarios y cambiar las condiciones laborales de las enfermeras instrumentistas”.
