El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha aprobado un nuevo Plan Regional de Drogodependencias y otras Adicciones “Horizonte 2018”.
Según el portavoz del Gobierno de esta comunidad, Nacho Hernando, se trata de un documento que establece las necesidades en esta materia, los objetivos a alcanzar y las acciones para cubrirlas y que pone fin a un periodo de prórroga de cinco años del anterior plan.
El papel de la enfermería es fundamental tanto en la prevención del consumo de drogas y otras sustancias como en la reeducación y cuidados de aquellos consumidores.
Sin embargo, además del servicio sanitario, existen otras medidas las cuales se recogen en este documento. Como novedad respecto a otros planes anteriores se incorporarán actividades preventivas y asistenciales dirigidas a adicciones relacionadas con el juego patológico y el abuso de las nuevas tecnologías.
Este plan consta de nueve capítulos en los que se describen los antecedentes, el marco institucional y normativo, el análisis y la evolución del consumo de drogas y otras conductas adictivas en Castilla-La Mancha. En total se establecen 74 acciones, agrupadas en cinco líneas estratégicas: prevención, intervención con personas con adicciones, formación, investigación y sistemas de información, y coordinación y participación.
El Plan apuesta también por mejorar la detección temprana con la puesta en marcha de programas preventivos en edades escolares, mejorar la formación de los profesionales y personas que intervienen en la prevención del consumo de drogas, como padres, asociaciones o mediadores, y primar la participación e implicación de la comunidad contando también con mecanismos de coordinación entre administraciones.