El Consejo de Colegios de Enfermeras y Enfermeros de Cataluña ha elaborado un manifiesto en el que reivindica el importante papel que los profesionales de enfermería suponen en la reducción del número de personas fumadoras. Según el manifiesto, con una adecuada prevención y promoción de la salud por parte de los enfermeros, la cifra de fumadores podría reducirse hasta en 65.000 personas al año.
Con esta intención, el manifiesto anima a los 42.000 profesionales de enfermería que tienen contrato en Cataluña a promover la salud y dar ejemplo, y defiende la integración en el catálogo de servicios de estos profesionales el abordaje y la intervención.
Además, en el manifiesto apoyan las políticas de control de tabaquismo y proponen diez acciones que el personal sanitario debe llevar a cabo, como por ejemplo el ofrecimiento por parte de los enfermeros para ayudar a dejar de fumar a cualquier paciente atendido en el ámbito sanitario independientemente de su patología o motivo de consulta.
Las acciones de prevención del tabaco, manifiestan que deben llevarse a cabo con los profesionales de enfermería como principales promotores de las estrategias de prevención, a través de la fomentación acerca del cumplimiento de la normativa de espacios sin humo. También, manifiestan su importancia en la prevención de la adicción al tabaco entre el personal sanitario. En este sentido los datos son buenos: en 1999 casi cuatro de cada 10 profesionales sanitarios eran fumadores, actualmente solamente el 11,7%.
