La ONG rusa Splav ha creado un robot-enfermero, bajo el nombre de “Ángel”. Este autómata se encuentra dentro del proyecto “Defensor del futuro” que, a su vez, está incluido en el equipo de combate de los soldados de este país. Este asistente personal ayudará al militar a neutralizar los objetivos y evacuarlo del campo de batalla.
Ángel tendrá la capacidad de diseñar un tratamiento detallado de los pacientes, después de diagnosticarlos, mediante la aplicación de distintos algoritmos. También podrá monitorear a los pacientes y comprobar si el tratamiento seguido está o no funcionando, si no es así, también tiene la capacidad de variarlo.
Actualmente están trabajando en dos modelos de androides, uno fijo o estacionario y otro móvil. El móvil está diseñado, concretamente, para ayudar al ejército en situaciones de emergencia, y para facilitar la evacuación de pacientes en lugares de difícil acceso. Estos robots serán utilizados tanto por personal militar como por civiles, en especial profesionales sanitarios.
Para completar el proceso tecnológico de automatización de la sanidad en situaciones de guerra y conflictos externos, el Centro Principal de Investigación y Pruebas Robóticas del Ministerio de Defensa de Rusia, ha creado otro robot llamado “Especialista”, cuya función se basa en el traslado de los heridos fuera del campo de batalla.