El Ministerio de Sanidad ha elaborado una guía de cribado sobre la infección por el virus de la hepatitis C y la vinculación de los pacientes diagnosticados al seguimiento y el tratamiento. El texto está contextualizado en el Plan Estratégico para el Abordaje de la Hepatitis C en el Sistema Nacional de Salud, informan desde la propia autoridad sanitaria en un comunicado.
En este sentido, los datos del último estudio de seroprevalencia de infección por VHC, llevado a cabo entre 2017 y 2018, reflejaban, según las cifras ofrecidas en la citada nota informativa, una estimación de unas 74.547 personas que presentaban una infección activa en España, de las que 22.478 no contarían con un diagnóstico.
Según este documento, la naturaleza de la situación epidemiológica conlleva que esta infección continúa siendo un problema de salud pública que precisa de respuestas sanitarias, sociales y políticas de forma integrada, ya que la prevención y el acceso equitativo al tratamiento se configuran como los fundamentos de la acción.
Cerca del 80% de los pacientes con hepatitis C, subrayan desde el Ministerio de Sanidad, presenta antecedentes de exposiciones de riesgo para el contagio; la prevalencia sigue siendo alta en personas consumidoras de drogas inyectadas y destaca un incremento significativo de la infección en hombres que mantienen relaciones sexuales con hombres y que tienen infección por VIH asociada a la práctica del chemsex.
Así, indica efectuar la prueba del virus a dichos sectores poblacionales con exposiciones de riesgo, así como para los afectados por coinfección por el VIH o hepatitis B, para las personas con ingreso en unidades de hemodiálisis crónica, con tatuajes realizados con herramientas son las precauciones de seguridad pertinentes o con exposición laboral al VHC, entre otros grupos. De acuerdo con la evidencia disponible, no se recomienda el cribado en personas sin exposiciones de riesgo.
Asimismo, con el objetivo de mejorar el acceso al cribado y a la vinculación al seguimiento del tratamiento, este documento propone actuaciones como que el diagnóstico se lleve a cabo en un solo paso, acciones formativas y de apoyo a sanitarios o la simplificación de los modelos de atención, para prevenir numerosas derivaciones. Esta guía se ha desarrollado con el consenso de las autonomías, sociedades científicas y la sociedad civil, destacan. Para acceder a la misma se puede seguir este enlace.
