El consejero de Sanidad del País Vasco, Rafael Bengoa, presentó hace unos meses un test de determinación genética, el cual constituye un nuevo servicio que Osakidetza ofrece a mujeres con cáncer de mama con el fin de evitar tratamientos de quimioterapia innecesarios para la curación de la paciente. El servicio vasco de Salud tiene previsto comenzar a aplicarlos este mes en seis hospitales del País Vasco.
Bengoa presentó esta iniciativa en el Hospital Universitario Donostia de San Sebastián donde destacó la importancia de que los recortes “no frenan los avances en Sanidad”. “El riesgo de fallecer por cáncer en Euskadi es hoy menor que hace 20 años, a pesar de que se producen más casos y esto se debe, entre otras cosas, a lo que hoy presentamos”, puntualizó el consejero.
El test consiste en la recogida de muestras de tejido tumoral, que se envían a un laboratorio. Una vez analizadas, se obtienen una serie de gráficas con los índices de riesgo, que pueden ser bajo, intermedio o alto.
Este avance es el resultado de un ensayo efectuado sobre 27 pacientes, de entre 36 y 70 años, desde el pasado mes de abril en los Hospitales de San Sebastián y Álava. Antes de realizar este test se prescribió un tratamiento con quimioterapia a 18 mujeres. Tras los resultados del test, solamente se mantuvo dicha indicación a siete mujeres, mientras que se desechó en las otras 11, evitando así los efectos secundarios que conlleva el tratamiento quimioterápico.
