Según datos de varios estudios de ámbito nacional e internacional, los profesionales enfermeros que desempeñan su labor en turnos rotativos diurnos y nocturnos, también en turnos de doce horas, ven perjudicada a la larga su salud. Estos estudios se centran en aspectos tanto cualitativos como cuantitativos, pero son estos últimos los que ponen de manifiesto que, en general, los turnos son negativos.
Falta de descanso, turnos voluntarios de doce horas
En el ámbito cualitativo, los principales aspectos perjudiciales de este tipo de trabajo son la escasa conciliación que los profesionales enfermeros pueden hacer de su vida laboral con su vida social. A este respecto, Llanos González, directora de enfermería del Hospital de Torrejón de Ardoz, en Madrid, ha asegurado, según recoge Diario Enfermero: «Hay enfermeras que hacen el turno de noche, acaban y el tiempo que deberían dedicar a descansar lo dedican a actividades familiares, llevar a los niños al colegio, estudiar… Siguen despiertas y ese es el riesgo del personal en turno fijo de noche». Destacando así los posibles perjuicios que las rotaciones pueden significar para su trabajo debido a la falta de sueño.
Por otro lado, en cuanto a los turnos de doce horas que algunos trabajadores desempeñan, Elvira Velasco, directora de enfermería del Complejo Asistencial de Salamanca, ha afirmado que estas dilatas jornadas laborales, en algunos casos, son demandadas voluntariamente por los propios enfermeros, ya que esto les permite disfrutar de más días libres: «A mí me han presentado los representantes de los trabajadores una propuesta para implantar turnos de 12 horas, pero eso hay que valorarlo también desde un punto de vista de la seguridad del paciente y el desempeño profesional del propio trabajador», según recoge el mismo medio.
Por lo tanto, en el terreno cualitativo, el debate de los turnos no está del todo clarificado.
Problemas de salud, riesgo de agotamiento
En aspectos cuantitativos, según un estudio empírico, realizado con 75.000 profesionales, publicado por la American Journal of Preventive Medicine apunta que los turnos aumentan el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, la mortalidad se incrementa un 11% en los enfermeros que trabajan en este régimen durante cinco años, y cáncer de pulmón.
Además, una investigación demoscópica europea, realizada en doce países de ámbito comunitario, incluido España y con alrededor de 32.000 enfermeros, pone de manifiesto que las consecuencias de los turnos de doce horas implican «importantes cuestiones para los administradores y empresarios, que deben ser conscientes de los efectos potenciales del agotamiento, que aumenta el riesgo de cometer un error e influye en la calidad de la atención sanitaria, el bienestar del empleado y un aumento del absentismo laboral», según recoge el diario El Mundo.
Así, queda demostrado, de forma numérica, que los turnos rotativos y las prolongadas jornadas laborales perjudican la labor de los profesionales.
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