Uno de los reconocimientos más importantes para la enfermería, encargada de promover el estado óptimo de salud de las personas y garantizar unos cuidados de calidad para sus pacientes, ha ido a parar al Hospital Universitario Vall d’Hebron, el cual ha resultado galardonado como el primer Centro Comprometido con la Excelencia en Cuidados de Enfermería.
Esta acreditación reconoce al hospital catalán con el más alto grado de calidad de su enfermería, gracias al compromiso adquirido por el cual se pusieron en marcha una serie de guías de buenas prácticas, elaboradas por la Asociación de Enfermeras de Ontario (Canadá), una de las más prestigiosas asociaciones a nivel internacional, con más de 60.000 personas afiliadas que la hacen convertirse en todo un referente. 
En este sentido, la RNAO ha realizado un programa que lleva por título ‘Best Practices Spotlight Organizations (BPSO), dedicado a la implementación de estas guías y coordinado en el Estado por Investern-ISCIII. Además del hospital de Vall d’Hebron, otros siete hospitales españoles recibirán un galardón que ya han conseguido centros de todo el mundo, como el Mount Sinai (Toronto, EEUU) o el St. Joseph’s Health Care de Londres.
El premio llega tras más de tres años de mucho trabajo, esfuerzo y dedicación de más de 150 profesionales trabajadores de 16 unidades, de las tres áreas en las que se divide el hospital. Las guías de práctica clínica van dirigidas al cuidado y manejo de la ostomía y a la prevención de caídas y lesiones derivadas de las caídas en personas mayores.
Con este premio, el hospital Vall d’Hebrón demuestra que las buenas prácticas realizadas en enfermería, no solamente mejoran la atención de los pacientes, sino que también contribuyen al ahorro de costes del sistema sanitario. La investigación en cuidados resulta clave para la profesión, y por ello el galardón le reconoce como uno de los mejores centros hospitalarios.
Felicidades para todo el equipo de enfermería.
En ese hospital (de los mejores y de los pioneros ya no de Europa sinó del mundo en investigación) hay muy buenos profesionales, pero también hay como mínimo un par de enfermeros toxicómanos con trastornos bipolares que en los descansos y fuera del trabajo se hinchan a fumar marihuana y son intratables y aunque no hayan dado muchos problemas en el trabajo presuntamente, está claro que más pronto que tarde afectará su estado psíquico a su labor de enfermeros y los pacientes se verán gravemente afectados y el estado de la sanidad ya está lo suficientemente perjudicado con los malditos recortes… Yo pediría al sr/sra director/a de enfermería de Vall d’Hebron que analizase bien sus profesionales, incluyendo análisis de drogas, tests psicológicos y psicotécnicos etc por el buen servicio de la enfermería de ese hospital con una óptima calidad.