Los presidentes del Consejo General de Enfermería y del Sindicato de Enfermería SATSE, Máximo González Jurado y Víctor Aznar, respectivamente, han celebrado un acto institucional en la sede del Consejo General de Enfermería, en Madrid, para presentar el Pacto para la Sostenibilidad y Calidad del Sistema Nacional de Salud (SNS) a responsables de sociedades científicas, asociaciones, directivos y estudiantes de enfermería.
Presidido por la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, el acto, el acto fue retransmitido vía streaming en tiempo real. La presentación ha contado también con la asistencia de la presidenta del Consejo Internacional de Enfermeras, Judith Shamian, quién ha sido un punto de encuentro profesional, con el fin de abordar el acuerdo alcanzado con la Administración para defender, de forma conjunta y coordinada, los intereses de los pacientes, el sistema sanitario español y los profesionales.
Asimismo, en el acto han participado las sociedades científicas de enfermeros especialistas, la Federación de Asociaciones de Enfermería Comunitaria y Atención Primaria, la Asociación Nacional de Directivos de Enfermería y el Consejo Estatal de Alumnos de Enfermería, quienes han valorado conjuntamente las repercusiones que tendrá el Pacto para la Sostenibilidad y Calidad del Sistema de Salud en el desarrollo y las condiciones profesionales y laborales de los enfermeros, así como en el funcionamiento del sistema sanitario.
Durante sus intervenciones, los presidentes del CGE y de SATSE han coincidido en resaltar la importancia del pacto, ya que “hará posible el desarrollo de distintas actuaciones que mejorarán las condiciones profesionales y laborales del colectivo de Enfermería, y fortalecerán el Sistema Nacional de Salud, garantizando una asistencia sanitaria pública, gratuita, universal y de calidad”.
En base a los compromisos adquiridos por todas las partes, dicho acuerdo promoverá la creación de empleo enfermero, fomentando una mayor presencia del colectivo en nuevos sectores y ámbitos de actuación profesional (atención sociosanitaria, educación, dependencia, etc.), así como mediante la ampliación de las competencias enfermeras dentro del SNS.
“Se promoverá el reconocimiento real y práctico de las especialidades enfermeras”
Asimismo, se llevará a cabo el desarrollo completo de la prescripción enfermera, el cual se realizará de forma autónoma con medicamentos no sujetos a prescripción médica y mediante guías de práctica clínica y asistencial y protocolos en el caso de medicamentos sujetos a prescripción médica.
Asimismo, se propiciará el reconocimiento real y práctico de las especialidades, se regularán las funciones de los enfermeros especialistas, se promoverá la categoría de enfermero especialista en los servicios de salud y se facilitará mediante concurso el acceso a la plaza, sin olvidar los auntos pendientes de desarrollo: las pruebas para el acceso al título o la aprobación del programa de enfermería en cuidados médico-quirúrgicos.
Por otra parte, el acuerdo propiciará el mantenimiento y mejora de las competencias enfermeras, a través del desarrollo de la legislación actual referida a la regulación del sistema de acreditación profesional, garantizando las mejores prácticas mediante la certificación y recertificación, creando un registro de profesionales y reforzando el rol enfermero como referente sociosanitario.
La enfermera tendrá un papel protagonista en gestión clínica
La gestión clínica orientada hacia la persona será otra de las competencias donde la enfermera tendrá un papel protagonista. Se desarrollará un modelo de gestión clínica por procesos, entendido como herramienta y no fin en sí mismo, orientado a la persona, integrador, colaborativo y multidisciplinar, y siempre dentro del sistema público.
En relación al entorno laboral, se mejorarán las condiciones de trabajo para que “los enfermeros puedan sentirse reconocidos, motivados y seguros”. Concretamente, se apuesta por un itinerario profesional, mejorar la seguridad en el trabajo, la conciliación de la vida laboral y personal, políticas más eficaces de recursos humanos, la mejora de la formación o el impulso a la investigación.
Finalmente, según han señalado los representantes de los enfermeros, el Pacto servirá para trabajar conjuntamente con los responsables sanitarios en la defensa y mantenimiento de una sanidad pública, universal y de calidad, garantizándo y consolidando la sostenibilidad y calidad del Sistema Nacional de Salud.
