Hace unas semanas, EuropaColon emitió un comunicado en relación al consumo de carne procesada y sus consecuencias a la hora de padecer cáncer de colon. Para conocer más sobre este tema, entrevistamos a Emilio Iglesia Castro, presidente de EuropaColon España.
Pregunta-. ¿Cuál es el trabajo que lleváis a cabo desde la asociación de pacientes, EuropaColon?
Respuesta-. En la asociación desarrollamos un programa de concienciación social centrado en la difusión entre la población de la prevención, las terapias y la calidad de vida en la supervivencia al cáncer de colon y recto. También ayudamos a aclarar dudas y dar soporte a enfermos y familiares a partir de nuestra experiencia común y conocimiento del medio sanitario por medio del contacto directo y en la red. Otro proyecto que estamos tratando de implementar es la creación de una conciencia preventiva entre el grupo de riesgo que haga más eficaz la prevención por el cribado en las comunidades autónomas donde está poco desarrollado y también dar a conocer a las personas en edades preadolescentes y a sus familiares lo que se entiende por llevar una vida saludable, especialmente centrado en los hábitos alimentarios.
Pregunta-. Hace unas semanas, desde EuropaColon España enviaron un comunicado con cinco consideraciones sobre el anuncio que hizo la Organización Mundial de la Salud (OMS) acerca de la relación entre el consumo de carne procesada y el cáncer de colon. El primer punto del comunicado dice: “No es cierto que la carne procesada y la carne roja tengan la misma relación con el cáncer que el tabaco”. ¿Podría ampliar este punto?
Respuesta-. Lo que queremos decir es que algunas interpretaciones del anuncio de la OMS eran confusas porque entendían que tener el mismo nivel de evidencia científica de los resultados del estudio es equivalente a tener el mismo nivel de peligrosidad para la salud de los productos estudiados.
Pregunta-. En el comunicado también se hace referencia a “una mala interpretación de la información” que ha dado la OMS. Esta institución ha clasificado la carne roja como Grupo 2ªA, es decir, “probablemente cancerígena para los seres humanos” y la carne procesada como Grupo 1, “cancerígena para los seres humanos”, es decir, hay pruebas convincentes de que causa cáncer. Puede llamar la atención que, en el comunicado, no se haga referencia al hecho de que el consumo de carne procesada está directamente relacionado con el cáncer. ¿Por qué?
Respuesta-. La relación con el cáncer de las carnes rojas y procesadas, ya conocida desde hace tiempo, forma parte de las descripciones que se suelen hacer de lo que es alimentación saludable. En esta asociación así lo manifestamos en todas nuestras conferencias divulgativas y actos en los que intervenimos. En el comunicado no hacemos referencia expresa a esa relación porque lo que trata (el comunicado) es de eliminar la alarma que se estaba creando con la interpretación que se daba.
Consumir carne roja y/o procesada fuera de las pautas aconsejadas aumenta el riesgo de contraer cáncer. Este riesgo es superior al existente si se ese consumo se hace dentro de esas pautas.
Pregunta-. El comunicado también explica que el aumento del número de fallecimientos por cáncer colorrectal se debe al aumento de la población y a su envejecimiento, pero no al consumo de carne roja y procesada. En el punto de vista contrario, desde el Proyecto sobre la Carga Global de Enfermedad, se determina que 34.000 muertes por cáncer al año en todo el mundo son atribuibles a dietas ricas en carne procesada y que, en particular, por cada 100 gramos de carne roja el riesgo de cáncer colorrectal puede aumentar en un 17%. El comunicado de EuropaColon no lo atribuye a estos factores, al contrario, en un comunicado que matiza estas informaciones de la OMS, se explica que es por aumento de la población y envejecimiento. ¿No tiene ninguna relación con el aumento de las muertes el aumento en el consumo de carne y, en particular, de carne procesada?
Respuesta-. El comunicado trata de salir al paso de una noticia recogida en una emisora de radio de difusión nacional en la que un médico decía que las muertes por cáncer colorrectal en España habían aumentado en las últimas décadas. Es cierto, pero se debe al aumento de la población y al envejecimiento de la misma. La relación directa del aumento del consumo de carne y las muertes por cáncer colorrectal no está definida en España. Los datos del estudio de la OMS son de escala mundial y se refieren a excesos de ingesta.
Pregunta-. Dejando de lado los comunicados, ¿cómo podemos prevenir el cáncer de colon?
Respuesta-. Con hábitos de vida saludables, que están conformados por la ausencia del tabaquismo, la ingesta reducida de alcohol, la alimentación saludable, tal como la dieta mediterránea, basada en la pirámide nutricional, el ejercicio físico acorde con nuestra edad y salud, el abandono del sedentarismo, evitar la obesidad y el estrés sobre todo.
Además es importante acudir a la llamada de las autoridades sanitarias a los cribados poblacionales de sangre oculta en heces en las Comunidades Autónomas donde se esté desarrollando ese programa y pidiendo su puesta en marcha donde no se esté desarrollando debidamente.
Pregunta-. ¿Influye la alimentación? ¿Qué alimentos deberíamos quitar de nuestra dieta para reducir el número de casos?
Respuesta-. Los nutricionistas pueden definir mejor este aspecto, pero de nuestra experiencia y conocimiento podemos concluir que para el cáncer colorrectal no hay alimentos malos sino cantidades no aconsejables.
Pregunta-. ¿Qué recomendaciones haría a una persona que tiene cáncer de colon en la lucha contra él?
Respuesta-.Que se deje guiar por su médico que sin duda formará parte de un Comité Multidisciplinar que verá las mejores opciones terapéuticas para su curación. Que entre en contacto con otras personas que estén en similar situación e intercambien dudas y experiencias. Por ejemplo nuestra asociación, que es sin ánimo de lucro y no tiene cuotas.
Finalmente que confíe en la Sanidad, incluyendo todos los estadios, las curaciones son cerca del 60%. En el estadio I son del orden del 95%, de ahí la importancia del cribado de sangre oculta en heces y en el estadio IV, el más grave, lo son de más del 20%.
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