Desde el Sindicato de Enfermería SATSE de Toledo, se muestra el rechazo al reparto unilateral de la productividad variable de 2013 llevado a cabo por la Dirección Gerencia de Atención Primaria de Toledo y exige al Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) la destitución de la gerente de Atención Primaria, Soledad Zuzuarregui , además de transparencia y acuerdos previos en la elaboración de los criterios de acceso a la productividad para las enfermeras toledanas.
Satse no entiende cómo es posible que el Sescam trate de esta manera a unos profesionales de Enfermería que desde el inicio de la mal llamada ‘crisis’ han visto disminuidos sus derechos, sus retribuciones y las plantillas enfermeras y que continúan manteniendo en pie un servicio de salud con déficit de profesionales de enfermería y fisioterapia. 
La Dirección Gerencia de Atención Primaria única y exclusivamente está gestionando con el recorte, situación que incide directamente en la calidad asistencial, puesto que prácticamente no se sustituye a los profesionales de enfermería cuando tienen que ausentarse legalmente de su puesto de trabajo, lo que provoca que estos profesionales tengan que asumir varias consultas a la vez, provocando un déficit en la calidad asistencial.
Para Satse, la desigualdad y falta de criterio que hay a la hora de adjudicar el complemento de productividad no consigue el objetivo que se persigue, que sería incentivar a los trabajadores en el desempeño de su trabajo, sino todo lo contrario puesto que se desmotiva a los profesionales, que no saben qué criterio se sigue para fijar este concepto retributivo y genera el individualismo de los profesionales de los equipos de atención primaria.
Es más, hay un grupo de profesionales que “por prescribir mejor que otros” van a percibir un incentivo de más de 4.000 euros de promedio en sus próximas nóminas, a pesar de que la Gerencia de Atención Primaria de Toledo ha superado su techo de gasto en el capítulo de Farmacia.
Desde Satse se exige que los criterios utilizados para fijar los objetivos de 2015 no incurran en los errores actuales, puesto que existen criterios como la perspectiva financiera, el cumplimiento de las demoras y listas de espera en los que los profesionales de enfermería prácticamente no intervienen en su gestión.
Por el contrario, otros índices como la implicación en los programas de promoción de salud y prevención de la enfermedad son parámetros de enfermería de la calidad prestada al usuario.
