Enfermeros alaveses han denunciado ante Osakidetza, el Servicio Vasco de Salud, la mala situación y la precariedad de las condiciones logísticas de las instalaciones de la Unidad de Psiquiatría Infanto-Juvenil de la OSI Araba, ubicada en el Hospital Universitario de la misma provincia vasca, afirmando que estas carencias ponen en peligro la integridad tanto de profesionales como de pacientes.
Las faltas que la enfermería alavesa ha puesto de manifiesto son la escasez de habitaciones, lo que se traduce en saturación de las mismas, destacando que esta unidad cuenta con tres estancias dobles que están comúnmente ocupadas por cinco pacientes de diferentes edades, la ausencia de un espacio exclusivo para hablar con los familiares y la presencia de una sala de comedor que cuenta únicamente con doce metros cuadrados y llega a albergar a nueve personas.
Para que estos factores no repercutan en la calidad de los tratamientos que reciben estos pacientes, el colectivo enfermero alavés reclama estancias individuales, una sala de consulta que garantice la confidencialidad de los pacientes y un ámbito común que tenga las dimensiones adecuadas.
Por otro lado, la dirección de la Unidad ha emitido un comunicado en el que expresan su desacuerdo con estas reclamaciones asegurando que los cuidados que dispensan son de garantía y de calidad, haciendo, de esta forma, un llamamiento a la calma entre la población alavesa.
