La campaña VIH con cuidado(s) busca concienciar, formar e informar a la población y a los profesionales. El objetivo del Consejo General de Enfermería (CGE) es mejorar la atención al paciente y prevenir nuevos casos, para la correcta atención a los pacientes con VIH.
A continuación, se presentan diez claves que deben tener en cuenta las enfermeras durante las citas con sus pacientes, evitando estigmas y ayudando a que se sientan bien durante sus visitas al centro sanitario.

El diagnóstico de VIH cuenta con profesionales formados que ayudan a calmar al paciente en ese momento tan duro. Las enfermeras conocen esta infección a la perfección y en estas consultas ayudan y resuelven todas las dudas. Además, como profesionales más cercanos a los pacientes, saben qué discurso utilizar para no ofenderlos en las consultas. De esta manera, se ayuda al paciente a comprender su nueva situación, a afrontar la realidad y a conocer los tratamientos.
Indetectable e intransmisible
Con los tratamientos actuales, la infección se vuelve crónica e intransmisible, es decir, que no se contagia. Aun así, las enfermeras deben informarse sobre cómo cada paciente tolera la medicación, conocer los síntomas que les produce y recomendar rutinas para que no olviden tomar los fármacos y asegurar el tratamiento.
En la consulta también se trata la salud mental y con ella la salud sexual/reproductiva. Las enfermeras animan al paciente a hablar con su entorno más cercano y a realizar actividades que les apasionen. Otros pasos clave para las enfermeras son: explicar las conductas de riesgo, revisar el calendario de vacunas de los pacientes, dar consejos de alimentación y planificar las consultas posteriores.
Para el CGE es imprescindible que se apueste por las consultas especializadas en VIH, que haya enfermeras expertas en la infección y que se proporcione la formación necesaria en el resto de profesionales.