El Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) ha anulado la orden de la Conselleria de Sanidad de 2013, la cual estableció la jubilación forzosa a los 65 años para el personal sanitario, por ser “contraria a derecho”. La sentencia de lo Contencioso – Administrativo así lo refleja en su escrito, ya que se estima que el recurso que interpuso el CSIF contra esa orden quebrantaba una serie de principios.
La falta del informe del Consell Jurídic Consultiu (CJC), que fue fruto de una acelerada tramitación de la orden, ha determinado la “nulidad radical” del texto aprobado a todos los efectos. Por otra parte, el sindicato celebra que la sentencia permita continuar en activo a quienes lo deseen, una vez cumplidos los 65 años, obligando además a readmitir al personal afectado( casi un millar de personas) y a abonarle los salarios dejados de percibir desde el día de su jubilación forzosa.
Entre los desacuerdos, se alegaba una falta de negociación colectiva, que debió llevarse a cabo en la Mesa de negociación, al contemplar situaciones que pudiesen afectar directamente a los derechos de los empleados públicos. Incluso se demostró que la orden contravenía un artículo del Estatuto marco del personal estatutario, al ocasionar un grave perjuicio a los interesados, ya que les privaba de su derecho a continuar en el servicio activo, a pesar de que encontrarse en perfectas condiciones para ejercerlo.
