En un plazo de tres años, las universidades deberán implementar el nuevo sistema de acceso y admisión para los titulados en Formación Profesional de grado superior y alumnos que proceden de sistemas educativos extranjeros.
Presentado a las Comunidades Autónomas, un proyecto de real decreto establecerá la normativa básica de los requisitos de acceso y los procedimientos de admisión y que, posteriormente, también será presentado a los rectores. Dicho proyecto sustituye a la actual Selectividad y establece la posibilidad de que las facultades establezcan pruebas o evaluaciones propias, así como entrevistas o la solicitud de determinada documentación a los aspirantes.
De este modo, las universidades pueden mantener en este tiempo el sistema el actual, es decir, someter a estos colectivos a las actuales Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU) en las carreras con más demanda o poner en marcha el nuevo sistema, que supone establecer unas pruebas y requisitos concretos para sus titulaciones (entrevistas, notas en asignaturas o experiencia profesional, entre otros).
Los rectores han mostrado su disconformidad con el proyecto de real decreto sobre este nuevo sistema de acceso, alegando “falta de tiempo” y “dificultades técnicas” para ponerlo en marcha en junio. Según la secretaria de Estado de Educación, Formación Profesional y Universidades, Montserrat Gomendio, el nuevo modelo es “voluntario para las universidades hasta el curso 2016-2017, pero cuando la selectividad desaparezca, entonces sí, no habrá opción”.
El presidente de la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas (CRUE), Manuel López, ha señalado que hay una “sensibilidad muy extendida entre las universidades de que la selectividad es un sistema equitativo, justo y controlado basado en el mérito”. Aunque ha señalado que tendrán que implantar el procedimiento que establece la LOMCE, también ha añadido la necesidad de una “prórroga para FP y bachilleres extranjeros”.
Durante el curso 2014-2015, se aplicará el nuevo sistema de acceso a titulados superiores de FP y a alumnos de los bachilleratos europeo e internacional, aunque varias Comunidades Autónomas y rectores admiten que no tienen tiempo suficiente para establecer este nuevo mecanismo por lo que han solicitado un aplazamiento, concretamente, para el curso 2016-2017, tal y como está previsto para los alumnos procedentes de Bachillerato.
