Los profesionales enfermeros de Málaga han enviado un comunicado para protestar y denunciar que no se ha contado con ellos para participar en el proyecto del nuevo hospital. Así, tal y como explican, la delegada del Gobierno andaluz en Málaga, Patricia Navarro, se reunió con la junta directiva del Colegio Oficial de Médicos, olvidando tanto a enfermeros como a las asociaciones de pacientes y a otros profesionales sanitarios.
Los enfermeros declaran que es una “falta de consideración” no contar con ellos al ser “el colectivo más numeroso y que más tiempo trabaja en los hospitales”. Ven un error que a la hora de iniciar un proyecto como la creación de un hospital nuevo no cuenten con ellos. “No es casual que gran parte de los acondicionamientos externos e internos que posteriormente se acometen en hospitales en funcionamiento tiene que ver precisamente con no haber contado con la opinión y recomendaciones de los enfermeros, que son una de las voces más autorizadas”, aseguraba en el comunicado Juan Antonio Astorga, presidente del colegio.
“Los hospitales, sobre todo, son para los pacientes. Los técnicos, presentes durante su construcción, se van, quedando los pacientes y los que los atendemos, los que los visitan y los que les acompañan. Por eso se ha de tener una concepción dinámica y adaptativa a nuevas necesidades de todo tipo evitando obsolescencias que siempre se pagan caras” según establece el presidente.
“Tras todos los vaivenes que ha sufrido el proyecto del tercer hospital, no exento de intereses urbanísticos, reasumida ahora por el propio presidente de la Junta su ubicación, con el gran impacto medioambiental que causará, se hace necesario que previamente se depuren los problemas técnicos, no con soluciones de opinólogos sino de expertos. Problemas, entre otros, como los vinculados a la accesibilidad, los propios del incremento de la movilidad urbana o los internos de diseño y funcionamiento”, afirma el presidente añadiendo, que “mientras que el hospital no sea una realidad no disminuirán problemas estructurales derivados de déficits de camas o de uso ineficiente de los recursos con los que ya contamos. También es una oportunidad para que el modelo hospitalario esté más enfocado a procesos agudos se oriente también a la atención de personas con problemas crónicos de salud, más complejos, con más reingresos y más medicalizados que bien cuidados”, aprovechando recursos propios.
El colegio, que ve como una equivocación de la Junta el no contar con las aportaciones del colectivo, preguntará a los colegiados, a través de sus propias redes, sobre aspectos relevantes de lo que debe ser un nuevo modelo hospitalario y respecto a este hospital, que “antes fue humo y no debe ser ahora el cuento de las mil y una camas”. Un hospital debe ser un proyecto de todos, para que sea más creíble y el mejor de los posibles.
