El Colegio Oficial de Enfermería de Pontevedra organizó una jornada en Vigo en la que se abordó la necesidad de luchar por el estatus que corrsponde a esta profesión.
Tras las ocho ponencias desarrolladas durante la la jornada, se planteo el debate sobre la prescripción enfermera, tema polémico que comenzó en España tras conocerse un borrador del Real Decreto que quiere aprobar el Ministerio de Sanidad.
Según este borrador, los enfermeros estarán obligados a realizar un curso de entre 150 y 180 horas lectivas en el caso de los enfermeros generalistas. “No tienen en cuenta que Enfermería es un grado de cuatro años y en el que cursan un mínimo de 12 créditos de farmacología. Es un negocio con una empresa privada”, señaló el sociólogo Juan Hernández.
El Colegio de Enfermería de Pontevedra ha sido uno de los ocho colegios profesionales de España que han firmado un manifiesto contra esta propuesta, junto con los de Murcia, Alicante, Valencia, Castellón, Baleares, Barcelona y Valladolid, aunque actualmente existen otras organizaciones colegiales que también se lo están planteando.
Por otra parte, las jornadas trataron otros temas como los retos de la enfermería ante las enfermedades crónicas, los cambios que se avecinan en la atención al paciente gracias al uso de internet y las nuevas tecnologías, la gestión de la calidad en los cuidados o la formación.
“Lucha por el poder con la profesión médica”
Una de las ponencias más esperadas fue la del sociólogo y consultor Juan Hernández, autor del libro “La Enfermería frente al espejo: Mitos y Realidades”. Hernández propone que los enfermeros ocupen definitivamente el estatus que merecen como profesión titulada y autónoma, y que se desarrolle todo su potencial.
Bajo su punto de vista, existen variosproblemas: la enfermería es una profesión científica, pero se vende poco y mal, y continúa con una imagen de gente vocacional y altruista, incapaz de romper con una ideología del siglo XIX; la lucha por el poder con la profesión médica que no reconoce que ahora hay muchas funciones que puede asumir el enfermero; y que los líderes, como es el caso del Consejo General de la Enfermería, están en el cargo desde 1987 y “se preocupan más de hacer negocio que de los problemas de la profesión”.
Sobre relación al Colegio de Pontevedra, señaló que su directiva es antigua, pero sin embargo es de los que más servicios prestan con la misma cuota y que “el presidente sigue trabajando de enfermero, conoce los problemas y está abierto a admitir críticas”.
