La IV Jornada de Enfermería de Salud Mental ha situado la problemática de la atención y cuidados a las personas con problemas de salud mental y sus familias y animando a las enfermeras especialistas en esta rama a seguir persiguiendo la calidad de los cuidados en todos los ámbitos asistenciales.
La AEESME (Asociación Española de Enfermería de Salud Mental) rindió un homenaje a su socio D. Miguel Melero Queremón por su trayectoria profesional y por su dedicación a la causa de esta Asociación haciéndole entrega de la insignia de la AEESME.
El presidente de la Asociación, Francisco Megías-Lizancos, agradeció al Colegio de Enfermería de Alicante y al CECOVA, también a las empresas colaboradoras y especialmente a los miembros del Comité Organizador y Científico, por su dedicación en esta actividad voluntaria y al servicio del desarrollo profesional de las enfermeras especialistas en salud mental.
Conclusiones para la salud mental
La primera de las conclusiones de la Jornada fue la necesidad de que “la totalidad de los puestos de trabajo en el ámbito de la salud mental sean ocupados por enfermeras especialistas”. De esta manera, se garantizaría “el acompañamiento adecuado en la recuperación y bienestar de la comunidad usuaria de los servicios de salud mental”. También se demandan dos cuestiones “necesarias para plena y equitativa consolidación de la categoría de enfermera especialista en Salud Mental”, como el incremento de los recursos financieros y la ordenación legislativa a nivel regional y estatal, permitiendo aumentar la densidad de enfermeras y mejorar la cartera de servicios para responder a las necesidades de cuidados de la población.
La segunda conclusión a la que se ha llegado es que se postula como recursos estratégico eficiente y sostenible la Unidad Funcional Asertivo-Comunitaria. “Este servicio promueve la continuidad de cuidados de actuar a través del ciclo vital de la comunidad en equipos asistenciales diversos coordinados por enfermeras. Los cuidados deberán planificarse desde las necesidades percibidas por los/as usuarios/as.
Como tercera conclusión, se ratifican los resultados de salud positivos en los usuarios de servicios comunitarios de salud mental liderados por Enfermería. “La intervención sobre integración social y reducción del estigma mediante el deporte y la intervención de formación e inserción laboral dirigida a la capacitación como técnicos de apoyo mutuo son ejemplo de ello”.
La acción psicoterapéutica enfermera se enmarca en teorías psicológicas y modelos de Enfermería y se presenta como una estrategia terapéutica con identidad propia orientada a la gestión del autocuidado. “La psicoterapia enfermera debe poseer una estructura y unos criterios de evaluación que permitan medir su efecto en la salud y bienestar de las personas”.
Por último, “se manifiesta la necesidad de que la Enfermería especializada en Salud Mental coopere en la capacitación de los equipos asistenciales de las urgencias hospitalarias o extrahospitalarias como recurso clave para el abordaje de la conducta suicida que garanticen el acompañamiento desde el principio del circuito asistencial”.
