Se llevaba tiempo avisando de que noviembre se presentaría bastante pobre en cuanto a contrataciones sanitarias, y más concretamente en el Hospital Regional Carlos Haya de Málaga, donde al parecer las aguas bajan cada vez más revueltas, según ha emitido Satse en un comunicado. La falta de profesionales de enfermería que sufren todas las unidades han elevado la tensión y el malestar y han puesto al hospital en una situación límite, según reconocieron ayer fuentes consultadas.
La solución a esa crisis pasa por abrir el grifo de las contrataciones y, de ese modo, cubrir los huecos que hay en los distintos servicios hospitalarios. Sin embargo, los contratos brillan por su ausencia o se hacen a cuentagotas. La autorización de las contrataciones debe darla el Servicio Andaluz de Salud (SAS) en Sevilla. Sin ese permiso, la gerencia de Carlos Haya se ve con las manos atadas. 
José Luis Doña, gerente del centro hospitalario malagueño, y Cipriano Viñas, director de Enfermería, deben solucionar un problema que sobre todo afecta más en el sentido económico. Las arcas de la sanidad pública andaluza andan muy cortas de efectivos, por lo que desde el SAS mira con lupa cualquier petición de nuevos contratos. Si se tiene en cuenta que este es el tercer año de recortes continuados en los hospitales y que el presupuesto que se destina a nuevas incorporaciones de personal está agotado, el panorama que se observa es bastante pesimista
La situación ha ido empeorando con el paso de las semanas
Y es que, a medida que han ido transcurriendo las semanas, no solo la falta de enfermeros afecta al servicio de Urgencias del Carlos Haya, sino que es la tónica predominante en el resto de las unidades del centro hospitalario, según manifestó el presidente de la junta de personal de Carlos Haya, Juan Antonio Torres (CC OO). “La situación que se vive en el hospital es muy difícil. El personal
de enfermería ya no puede seguir así por más tiempo. Esto reventará en cualquier momento como no se contrate a los profesionales que hacen falta para cubrir los numerosos huecos que hay”.
Cabe destacar que, en caso de no llegar a una rápida solución, la situación, en lo que resta de año, puede ir a peor todavía si el SAS en Sevilla no atiende las demandas de contrataciones formuladas por los sindicatos del hospital.
