La Sociedad Española de Cuidados Paliativos (SECPAL) y la Asociación Española de Enfermería de Cuidados Paliativos (AECPAL) han emitido un comunicado en el que ponen a disposición de los profesionales una serie de recomendaciones para la atención paliativa en los domicilios de los pacientes, ante la situación por el coronavirus.
Así, según lo expuesto por las entidades en la citada nota informativa, “los pacientes con necesidad de cuidados paliativos precisan una atención continuada que garantice su confort. Es decir, que a los pacientes gravemente enfermos y a sus familias se les debe proporcionar atención paliativa durante el proceso para evitar que se sientan abandonados por el sistema. Obviamente, esta debe ser modificada por responsabilidad y coherencia con el resto de los servicios”.
De esta forma, algunas de las sugerencias de ambas instituciones pasan por “priorizar la atención de aquellos enfermeros en los que no sea posible posponer la visita domiciliaria según criterios de complejidad, como mal control sintomático, inestabilidad clínica, alta complejidad emocional o social, situación de últimos días y aquellas que los propios profesionales identifiquen como no demorables”.
En este sentido, si se da este caso, de forma previa a la visita se ha de “preguntar telefónicamente sobre posibles síntomas, como fiebre y/o clínica respiratoria, tanto del enfermo como de las personas de su entorno, con vistas a extremar las medidas de protección y realizar la misma según indicaciones del Ministerio de Sanidad ante pacientes sospechosos”.
Si ni el paciente ni el entorno no presentan síntomas, “se deben tomar las medidas de precaución habituales que se recomienden desde el servicio de salud correspondiente”, entre las que se incluyen que “las visitas deberían ser realizadas por un único profesional; los profesionales deben extremar al máximo las medidas de higiene de manos con agua y jabón, antes y después de cada visita y tras el contacto con el paciente y familiares, así como antes y después del contacto con superficies en espacios comunes, y disponer de gel hidroalcohólico en el maletín domiciliario y usarlo con frecuencia; la exploración del usuario debería ser realizada con doble guante de un solo uso; después de cada visita se debe desinfectar el material utilizado; deberá facilitarse la medicación necesaria en cuantía suficiente para que no se vean desabastecidos en ningún momento; sería recomendable realizar educación sanitaria a los cuidadores”.
Otra de las pautas que ofrecen desde SECPAL y AECPAL es que los profesionales acudan a los domicilios con el material de protección preciso “en función de la situación” de cada uno, con vistas de proteger al personal, a los enfermeros y a sus allegados.
En este sentido, destacan, “si tras la valoración del paciente en domicilio se considera necesaria su hospitalización, se deberá establecer un protocolo que procure el ingreso de forma directa, evitando el paso por los servicios de urgencias. Ante la presumible baja disponibilidad de camas, recurrir al ingreso debería considerarse solo en caso de extrema necesidad y siempre que no exista otra alternativa”.
De esta forma, “para el resto de situaciones se recomienda intensificar el contacto telefónico y la coordinación con los equipos de Atención Primaria”. Es aconsejable “llamar periódicamente a todos los paciente incluidos en el programa para conocer su situación y explicar las medidas” que se han de poner en marcha “ante un empeoramiento de la situación. Como medida alternativa se debería habilitar un teléfono de consultas, 24 horas, siete días, para ofrecer accesibilidad y aumentar la seguridad y que los afectados y sus familias no se sientan abandonados en esta situación”. “En aquellos lugares donde sea posible, se pueden realizar consultas mediante telemedicina”, señalan ambas entidades.
Por otra parte, “los profesionales con clínica respiratoria aguda o fiebre se abstendrán de acudir a su puesto de trabajo, contactarán con el servicio de salud laboral correspondiente y seguirán las indicaciones pertinentes establecidas en su comunidad autónoma. Aquellos que hayan podido tener algún contacto con pacientes sospechosos o positivo de coronavirus realizarán el seguimiento indicado por el servicio de salud correspondiente y deberán seguir los protocolos de actuación definidos por estos”, concluyen.
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