La Asociación Española de Pediatría (AEP) ha elaborado, en colaboración con el Ministerio de Sanidad, la Sociedad Española de Ginecología (SEGO), la Sociedad Española de Infectología Pediátrica (SEIP) y la Sociedad Española de Neonatología (SENeo), un informe titulado Procedimiento de manejo de la infección por virus Zika durante el embarazo y en recién nacidos. 
El documento persigue el objetivo de mejorar el seguimiento de las mujeres embarazadas y los bebés recién nacidos que estén en riesgo de padecer la infección del Zika para establecer un diagnóstico rápido y permita efectuar un tratamiento adecuado en caso de infección congénita.
El protocolo publicado por la AEP no solo se limita a establecer las vías de actuación en caso de contagio, sino que contempla también los procedimientos que deben llevarse a cabo en caso de las gestantes estén en riesgo de infección o tengan probabilidades de haberla contraído.
Además, por otro lado, los profesionales sanitarios que lleven a cabo el diagnóstico están obligados a comunicarlo a las autoridades competentes en caso de infección.
El virus del Zika puede producir problemas en el desarrollo del sistema neurológico del feto, pudiendo traducirse en complicaciones como la microcefalia, las calcificaciones cerebrales o incluso cataratas y mocroftalmía, entre otras patologías oculares, por lo que una detección precoz de la misma se vuelve indispensable. El manual se encuentra disponible, de forma íntegra, siguiendo este enlace.
