El Consejo de Enfermería de la Comunidad Valenciana ha querido poner de manifiesto, en una nota de prensa emitida con motivo de la celebración, durante la jornada de hoy, del Día Mundial de la Diabetes, la importancia de las enfermeras escolares en el abordaje de los pacientes que padecen esta patología y de su entorno familiar, tanto en el ámbito del diagnóstico como en la educación para la salud. 
Una figura la de la enfermera escolar, destacan, “cuya presencia en los centros educativos públicos de la Comunidad Valenciana en estos momentos es obviada por la Administración autonómica y que, a tenor de la incidencia y previsiones de la enfermedad, se hace más necesaria que nunca”.
Asimismo, para la entidad enfermera son significativos los datos de la Fundación para la Diabetes, sobre un estudio elaborado por la Federación Internacional de la Diabetes, que reflejan que muchos padres tienen dificultades a la hora de identificar los síntomas de alerta de la dolencia en sus hijos. “A pesar de que la mayoría de los encuestados tenía un familiar afectado, cuatro de cada cinco padres tendrían dificultades para reconocer los signos de alerta, y uno de cada tres no los reconocería en absoluto”.
Por otra parte, las cifras de la Estrategia de Diabetes de la Comunidad Valenciana 2017-2021, ofrecidos en la citada nota informativa, apuntan a que la prevalencia en la región es del 7,8%, lo que significa que hay 400.000 diagnósticos; sin embargo, al menos el 6% de la población padece diabetes mellitus tipo 2 y lo ignora, por lo que el porcentaje podría ser mayor y alcanzar a 700.000 personas. “Datos que ponen de manifiesto la importancia de las enfermeras escolares en esta tarea de detección”.
En dicha estrategia, en este sentido, se destaca que esta enfermedad se ha convertido en una pandemia provocada por otra epidemia global: la obesidad, “un problema de salud en cuya lucha están también altamente implicadas las enfermeras escolares. Al ser una enfermedad ligada al exceso de peso (indica el documento), el fenómeno del aumento progresivo de las tasas de sobrepeso y obesidad permite formular una estimación futura también hacia un incremento en los casos de diabetes tipo 2”.
“La presencia de una enfermera escolar, además de garantizar una atención sanitaria adecuada a escolares con patologías crónicas, serviría para educar a los más jóvenes en hábitos saludables respecto a la alimentación, el fomento del ejercicio físico y prevención de adicciones, de enfermedades de transmisión sexual (ETS), de embarazos no deseados, de trastornos alimentarios como la anorexia y la bulimia”, concluyen desde el CECOVA.
