La vacunación sigue su curso pero a niveles muy desiguales según cada país, algo que puede poner en peligro y frenar el avance si algunos países tienen una amplia tasa de vacunación y otros apenas han inoculado una dosis.
El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, durante su intervención en una conferencia sobre igualdad en el acceso a las vacunas, consideró un “fracaso moral y epidemiológico” la baja tasa de vacunación en África, una realidad que “está creando las condiciones ideales” para el surgimiento de nuevas variantes del coronavirus.
Además, director general de la OMS deploró que los países desarrollados y los fabricantes hayan desarrollado un “nacionalismo de las vacunas”, que “ha limitado severamente” la capacidad de actuación de Covax.
El resultado de ello es que el 83% de la población africana todavía no ha recibido una dosis de la vacuna, lo que “no es sólo un fracaso moral, también es un fracaso epidemiológico, que está creando las condiciones ideales para que surjan nuevas variantes”. A pesar de ello, destacó que Covax está superando “muchas de las limitaciones de suministro y entrega”, con casi 1.200 millones de dosis de vacuna entregadas, y unas perspectivas halagüeñas para este año.
En ese sentido, expuso que, gracias a las dosis compradas y donadas, este mecanismo está en condiciones de garantizar una cobertura del 45% en los países receptores a mediados de este año.
Del mismo modo, subrayó que la OMS ha actuado para facilitar el intercambio voluntario de tecnología, propiedad intelectual, conocimientos o datos, como lo pone de manifiesto el hecho de que seis países africanos, entre ellos Nigeria, recibirán los instrumentos necesarios para producir sus propias vacunas.
