Las enfermeras de Atención Primaria de La Rioja están al cargo del nuevo programa de peticiones a laboratorio que ha desarrollado la Consejería de Salud de La Rioja. A través de este sistema, que se incluye en el procedimiento de extracción de muestras clínicas, los profesionales averiguarán con un lector de código de barras las pruebas que requieran los pacientes, dentro de las que pueda registrar su historial.
El objetivo que se persigue con la puesta en marcha de este programa, según informa el Ejecutivo de la región en un comunicado, es aumentar la seguridad de las personas afectadas, previniendo las equivocaciones en la identificación y la gestión de las analíticas pertinentes.
En este sentido, y de acuerdo con la normativa europea promulgada para evitar heridas con material punzante en el sistema sanitario, se ha provisto a todas las áreas básicas de salud de La Rioja de herramientas de bioseguridad para las extracciones, con dispositivos específicos para asegurar la protección tanto del personal como de los pacientes, así como con recipientes para la recogida, el transporte y la conservación de las muestras hasta el laboratorio.
Diversas autoridades sanitarias de la provincia, como María Martín, consejera de Salud, José Miguel Acítores, director del Área de Salud, Juan Carlos Oliva, director de Innovación Sanitaria, y Carmen Díaz, directora de Enfermería de Atención Primaria, han acudido al Centro de Salud de Nájera para constatar el funcionamiento del mencionado programa, apuntan desde el Ejecutivo.
Martín ha querido poner de manifiesto, de acuerdo con lo expuesto por el Gobierno riojano, durante este acto, que otra de las finalidades de este sistema pasa por alcanzar un modelo de seguridad de garantice la máxima seguridad de las personas, minimizando los riesgos. Por otro lado, la consejera destacó que, previamente la implementación de este programa, se puso en marcha un protocolo sincronizado de petición a laboratorio, por el que todas las solicitudes quedan registradas en la historia clínica digital.
