Cuando hacemos referencia a la enfermería obstétrico ginecológica nos referimos al profesional sanitario que proporciona una atención integral a la salud sexual, reproductiva y maternal de la mujer en todas sus fases, tanto de prevención, como en promoción, atención y recuperación.
La enfermera obstétrica (o matrona) se encargará de la salud de la madre y el bebé en el embarazo, parto y posparto, además de la salud sexual y reproductiva de la mujer a lo largo de su vida.
Competencias clave en enfermería gineco obstétrica
El ámbito de actuación de las matronas abarca, tanto la Atención Primaria -centros de salud, comunidad, familia y domicilio-, como la Atención Especializada -hospital u otros dispositivos dependientes del mismo. Además, las matronas pueden ejercer en el sector público y en el privado, por cuenta ajena o por cuenta propia.
El tarbajo en enfermería ginecoobstetra abarca las siguientes funciones:
- Proporcionar información relacionada con el embarazo, la lactancia, el cuidado infantil y la vida sexual.
- Ofrecer atención prenatal, como llevar un control regular de la mujer embarazada con el fin de vigilar posibles trastornos tanto físicos como emocionales.
- Facilitar programas de preparación para el parto, así como programas para el embarazo, el nacimiento, el posparto, la lactancia y la salud reproductiva.
- Brindar apoyo emocional a la embarazada.
La matrona debe asistir durante el parto y, cuando nace el bebé, será el profesional sanitario responsable de este durante la etapa perinatal, que es la que se corresponde a sus primeros 28 días de vida. De este modo, deberá prestar atención durante el periodo de puerperio al neonato y detectar precozmente situaciones de riesgo durante el primer mes de vida.
En sus fases preventiva y de atención y recuperación de la salud la enfermería en gineco obstetricia es clave, pues será la figura de acompañamiento y de guía que velará por el buen estado físico y mental de la mujer tanto durante el embarazo como después de este. Asimismo, además de asistir al parto, también atienden a la madre durante el periodo del puerperio, es decir, tras el nacimiento del bebé y hasta el 28 día de vida de este.
Desafíos en la atención obstétrico ginecológica
Montserrat Angulo, vocal matrona del Consejo General de Enfermería y presidenta del Colegio de Enfermería de Alicante, afirmaba que “Hay que llamar la atención sobre el hecho de que el ritmo de progreso en la creación de profesionales de asistencia a la salud sexual, reproductiva, materna, neonatal, infantil y adolescente no está mejorando al ritmo necesario para cumplir el Objetivo de Desarrollo Sostenible 3 (reducir la tasa mundial de mortalidad materna a menos de 70 por cada 100.000 nacidos vivos para 2030) y se prevé que la brecha, entre los países de altos y bajos ingresos aumente”.
Según las estimaciones de la AEM, en España faltan más de 1.000 matronas para alcanzar las ratios adecuadas de 25,9 matronas por cada 1.000 nacimientos que determina la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Muy lejos quedan las cifras españolas, que se sitúan en 12,4 matronas por cada 1.000 nacimientos.
“Nos enfrentamos a un mal endémico y prevalente, como es la falta de matronas. Los gobiernos deben asumir un papel activo y responsable. El nuestro, en particular, instando a la formación de un número mayor de profesionales, asegurando las máximas garantías de que la formación sea ajustada al programa y creando más plazas de matronas en el SNS, tanto para Atención Especializada como en Atención Primaria, porque estamos sobresaturadas. La atención de nuestras mujeres y sus hijos es la prioridad y la propia esencia de la profesión de matrona”.
Avances y tendencias en enfermería obstétrica
La tecnología ha desempeñado un papel fundamental en el campo de la obstetricia, mejorando la atención médica y el cuidado prenatal. Estos avances se han visto destacados en diferentes formas de manera positiva, dando un cuidado eficiente: ha avanzado el Doppler, que ahora es electrónico y ha simplificado y mejorado la manera de llevar a cabo la detección de latidos. También el monitoreo fetal ha avanzado en comparación con los métodos tradicionales. En otra área, en la práctica diaria de obstetricia, se ha empleado varios tipos de tecnología relacionada con los métodos anticonceptivos. A lo largo del tiempo, estos métodos han ido evolucionando y modernizando.
Pero también hay desafíos que se necesitan cumplir para mejorar la enfermería obstétrica, como las ratios de matronas.
“Debemos ampliar el número de plazas EIR para mejorar las ratios de matronas y poner solución a una escasez que se acrecentará mucho más en los próximos años”, ha subrayado el presidente de las más de 325.000 enfermeras y enfermeros de España”, explica Florentino Pérez Raya.
Pero, además de la falta de matronas, también han debatido sobre la necesidad de abordar la prescripción enfermera en este ámbito. “Hemos analizado la información que tenemos y queremos aportar todo nuestro conocimiento para que los protocolos y guías que se están preparando sean lo más completas posibles”.
La Organización Colegial de Enfermería, la Asociación Española de Matronas (AEM) y la Federación de Asociaciones de Matronas de España (FAME) denuncian que la escasez de matronas en nuestro país pone en riesgo la seguridad y la salud reproductiva de las mujeres, de los recién nacidos y de los propios profesionales. “Hay que llamar la atención sobre el hecho de que el ritmo de progreso en la creación de profesionales de asistencia a la salud sexual, reproductiva, materna, neonatal, infantil y adolescente no está mejorando al ritmo necesario para cumplir el Objetivo de Desarrollo Sostenible 3 (reducir la tasa mundial de mortalidad materna a menos de 70 por cada 100.000 nacidos vivos para 2030) y se prevé que la brecha, entre los países de altos y bajos ingresos aumente”, afirmaba Montserrat Angulo, vocal matrona del CGE.
