Profesionales enfermeros del Hospital de Poniente, ubicado en la provincia de Almería, integran el equipo multidisciplinar, conformado por las áreas de traumatología, anestesiología y reanimación y fisioterapia, entre otras, que participa en el protocolo de rehabilitación precoz ante operaciones de prótesis de cadera que ha puesto en marcha el centro.
Con este programa, informan desde la Junta de Andalucía en un comunicado, se promueve que los pacientes intervenidos puedan empezar a andar 24 horas tras el proceso y se facilita que se reincorporen más rápidamente a sus actividades. Así, a través de la labor conjunta de los profesionales se escoge a las personas aptas para incluirse en el protocolo de rehabilitación y se trabaja con ellas, de forma previa y posterior a la operación, para fomentar su restablecimiento.
De esta forma, la rehabilitación temprana se basa en distintas etapas, a saber, las consultas de traumatología, anestesiología y enfermería, la intervención, la hospitalización, el alta y la revisión en consultas. En la primera se lleva a cabo la selección de la persona; en la segunda se abordar el control del dolor tras la operación y la prevención de complicaciones; en la de enfermería se ofrece de nuevo información sobre todo el proceso y se estudia si el paciente tiene el apoyo social necesario para encarar los primeros momentos una vez dado de alta.
Una vez concluida la operación, el abordaje conjunto de profesionales enfermeros y fisioterapeutas facilita que la persona comience a caminar con muletas al día siguiente. Además, la enfermera gestora de casos del Hospital de Poniente se encarga del seguimiento tras el alta, que se produce 24 o 48 horas tras la intervención. Por último, durante la primera semana tiene lugar la revisión en consultas, en las que se solventan dudas y da comienzo el programa de fisioterapia para la rehabilitación.
Daniel Donarie, traumatólogo del centro, ha querido poner de manifiesto, en la citada nota informativa, que esta perspectiva perioperatoria se ha puesto en marcha para disminuir el estrés quirúrgico y promover la recuperación, destacando la complejidad del proceso y la necesidad de coordinación, así como los beneficios que reporta a los afectados. En este sentido, de acuerdo con los datos del Ejecutivo andaluz, se calcula que el 80% de este tipo de pacientes puede incluirse en esta técnica.
