Mbaye llegó a España en patera desde Senegal con tan solo 15 años, donde fue tan bien atendido que decidió estudiar Enfermería. Actualmente trabaja como enfermero en Hospital Universitario de Basurto (Bilbao) y es presidente de la ONG Sunu Gaal. El senegalés ha realizado varios viajes a su país de origen para ver a su familia y ayudar a personas con pésimas condiciones sanitarias.
Pregunta. Dejaste Senegal en 2003 y llegaste en patera a Tenerife (Canarias). ¿Cómo fue ese proceso?
Respuesta. La situación en Senegal estaba muy mal. Con 15 años vi la oportunidad de ayudar a mi familia y mejorar nuestra situación, y la única opción que tenía era coger una patera. Hablé con las personas que organizaban los viajes, pero me dijeron que era un niño y que necesitaba dinero para pagarlo. Yo no tenía nada y les dije que cuando llegara a España les daría el dinero que me pedían. Me dijeron que eso supondría el doble, pero a mí me daba igual porque yo quería salir, ya que la situación en mi casa no era la deseada.
P. ¿Cómo era tu vida allí? ¿Qué condiciones teníais?
R. Teníamos una situación muy complicada porque somos una familia de 5 hermanos, mi madre era la única que trabajaba y se buscaba la vida como podía. Había veces que nos íbamos a la cama con el estómago vacío. Así es la pobreza, y la realidad es que no comes tres veces al día. Eso generaba mucho sufrimiento y yo lo veía en los ojos de mi madre. Yo decidí emprender ese viaje e intentar al menos ayudar a mi familia.
P. ¿Por qué decidiste estudiar Enfermería?
R. Cuando llegué a Canarias, los sanitarios de la Cruz Roja me trataron muy viene hicieron una labor increíble. Les pregunté que cuál era su profesión y me dijeron que eran profesionales de Enfermería. Desde ese momento pensé: en el día de mañana me gustaría hacer lo mismo, y desde entonces siempre tuve muy claro que quería estudiar Enfermería. Y así lo hice. Me gradué en la Escuela Universitaria de Vitoria y he tenido la suerte de dedicarme a esta profesión tan bonita.
P. ¿Fue fácil adentrarte en el trabajo o has tenido alguna dificultad también en España?
R. No fue difícil porque en la Escuela tuve muy buena relación con los alumnos y los profesores. Estuve muy bien acogido en el centro y en el trabajo lo mismo, buen compañerismo y trabajo en equipo, que al final son cosas que enganchan.
P. ¿Cómo viviste la pandemia del covid como enfermero?
R. La pandemia fue dura, como para todos. Para mí, lo más duro fue cuando se morían las personas, ya que era una situación inesperada. La pandemia del covid es una experiencia más de mi vida, porque yo he vivido otros procesos anteriores tal vez más duros.
P. Además de enfermero, eres cofundador y presidente de Sunu Gaal. ¿Cómo nace esta organización?
R. Esta organización nació en el año 2017, porque por primera vez en ese año fue a Senegal a ver a mi familia y a sobrinos que habían nacido después de haber venido a España y no los conocía. En mi casa ya tenían todo lo que necesitaban, se comía tres veces al día, los niños iban al colegio y si tenían algún problema de sanidad se les podía llevar, pero en otras casas eso era impensable. Pensé que tenía que hacer algo para buscar una igualdad social y decidí crear la ONG Sunu Gaal, que significa ‘Nuestra patera’, cuyo objetivo es que esa patera se desarrolle en el mismo país y que la juventud no tenga que meterse en el mar a jugarse la vida como hice yo. Yo tuve suerte, pero hay gente que no ha llegado.
P. El 15 de octubre de 2022 volviste a viajar a tu pueblo en Senegal junto a otros sanitarios. ¿Qué hicisteis allí?
R. Montamos un equipo de 15 personas, 9 de ellos profesionales de Enfermería, en atención sanitaria y abrimos un centro con material equipado con todas las donaciones de mi hospital de Basurto y de otros hospitales. Durante los 10 días que estuvimos hicimos intervenciones quirúrgicas a aquellas personas que las necesitan y que no se lo pueden permitir porque hay que pagar para cada intervención, nosotros se lo hemos dado de manera gratuita. También hicimos artrocentesis a las personas con problemas de artrosis, e infiltraciones para personas con personas con artrosis o problemas de trauma para, al menos, reducir ese dolor, que es un paso muy grande. Además, atendimos las consultas a toda la población que pudimos y evitar que las enfermedades crónicas fueran a peor. Vino también una fisioterapeuta que dio masajes y trató a mucha gente durante el tiempo que estuvimos.
P. ¿Cómo los convenciste para ir?
R. La verdad es que fue fácil, porque en una charla les expliqué el proyecto y el contexto de la zona (cómo era el centro donde íbamos a trabajar, qué nos podíamos encontrar y cómo era la población), ellos lo entendieron y se han volcado desde el principio. Tenían casi más ganas de ir que yo y que la gente que nos estaba esperando. Además, tenemos una lista de espera de gente que se quiere unir a nuestra ONG.
P. ¿Qué condiciones tienen actualmente en Senegal?
R. La sanidad en Senegal es muy deficiente para el 90% de la población. Una persona con cefalea, tos o fiebre allí, antes de que le atiendan, tiene comprar un ticket que vale 2 euros.
P. ¿Cuánto material llevasteis?
R. Llevamos mucho material, el necesario para las intervenciones, las consultas y el posoperatorio. Además, recibimos donaciones que nos ayudaron a hacer bien el trabajo y sacar adelante la expedición.
P. ¿Fuisteis preparados psicológicamente para un viaje tan duro?
R. Yo ya había hecho ese tipo de cosas y algunas de las personas que fueron también me habían acompañado en la anterior. Para otros era su primera vez, pero estaban mentalizados y con mucha preparación.
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