El Gobierno de Navarra ha aprobado una nueva legislación para regular la instalación de desfibriladores externos al ámbito sanitario en espacios públicos, que establece que en determinadas zonas deben estar visibles, en un correcto estado de mantenimiento y al cargo de trabajadores instruidos para su utilización. 
El objetivo que se plantea el Ejecutivo foral con esta iniciativa, de acuerdo con lo expuesto por la institución en un comunicado, es asegurar una distribución eficaz de esta herramienta en todo el territorio autonómico y formar a la ciudadanía en la puesta en marcha de la cadena de supervivencia. Para ello, la Consejería de Salud ha elaborado vídeos, que están disponibles en la plataforma YouTube, en los que se ofrecen las pautas de actuación en caso de que se presencie un episodio de parada cardiorrespiratoria.
En este sentido, la nueva ley establece que estos dispositivos deben instalarse en los recintos con aforo máximo previsto de 700 personas, 500 en caso de actividades deportivas. De esta forma, centros de estudios, de trabajo, polideportivos o centros comerciales contarán ahora con desfibriladores, de la misma forma que las estaciones de tren o de autobús en poblaciones mayores de 10.000 habitantes.
Por otro lado, el material audiovisual está dividido en tres vídeos. En el primero se pone de manifiesto cómo activar la cadena de supervivencia, cómo detectar una parada cardiorrespiratoria y cómo actuar en estas situaciones, desde la llamada al 112 hasta la combinación de las maniobras de resucitación con el empleo de los desfibriladores hasta que los profesionales sanitarios acudan al lugar; en los otros dos, por su parte, se instruye en los casos en los que la necesidad de intervenir pueda generar dudas y cómo proceder al identificarlas.
Estas iniciativas, destacan desde el Gobierno de Navarra en la citada nota informativa, han sido recientemente puestas en conocimiento del público. En el acto de presentación de la nueva normativa y los vídeos participaron diversas autoridades sanitarias de la región, como Luis Gabilondo, director general de Salud, Lázaro Elizalde, director del Servicio de Ciudadanía Sanitaria, o Diego Reyero, responsable del código de activación de atención a la parada cardiaca.
