Premio Nobel de Medicina 2023
Un año más se conoce a los ganadores de los premios Nobel. En esta ocasión, han sido dos los ganadores de la categoría de Medicina. La bioquímica, Katalín Karikó, y el inmunólogo, Drew Weissman, por sus investigaciones y aportaciones que permitieron desarrollar las vacunas ARN contra el covid.
Sus descubrimientos fueron fundamentales para poder desarrollar vacunas ARNm eficaces contra el covid durante la pandemia. Desde la Asamblea Nobel del Instituto Karolinska apuntan que “los descubrimientos fueron fundamentales para desarrollar vacunas de ARNm eficaces contra la covid-19 durante la pandemia que comenzó a principios de 2020. Sus hallazgos han salvado millones de vidas y han prevenido enfermedades graves en muchas más. A través de sus descubrimientos innovadores, que han cambiado fundamentalmente nuestra comprensión de cómo interactúa el ARNm con nuestro sistema inmunológico, los galardonados contribuyeron a la tasa sin precedentes de desarrollo de vacunas durante una de las mayores amenazas a la salud humana en los tiempos modernos”, señaló el comité.
Los dos llevaban 20 años investigando. Se descubrió que la información genética del ADN se transfería al ARNm, que se utiliza para la producción de proteínas, lo que abrió las puertas a un uso terapéutico, y pronto los científicos vieron las posibilidades de esta técnica en el desarrollo de vacunas.
La investigación no fue sencilla. Se encontraron con problemas porque el ARNm que se elaboraba in vitro era difícil de encapsular, por lo que causaba reacciones inflamatorias al administrarlo. Siguieron investigando y, 20 años más tarde, encontraron la respuesta. Produjeron distintas variantes de ARNm, cada una con alteraciones químicas en sus bases, y descubrieron que con determinadas modificaciones la respuesta inflamatoria desaparecía, lo que abría un mundo de posibilidades terapéuticas, acababan de descubrir el uso del ARN, como terapia. En 2005 publicaron sus primeros trabajos y en los cinco años siguientes consiguieron perfeccionar su tecnología para aumentar la producción de proteínas.
Vacunas ARN contra el covid
Así, inmersos en 2020, un año marcado por la aparición del covid, los investigadores de los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) de Estados Unidos y los de Moderna ya habían diseñado una vacuna que la farmacéutica comenzó a probar en humanos el 16 de marzo. En ese punto, Pfizer (en colaboración con BioNTech) y Moderna avanzaban casi a la vez: en noviembre, la primera farmacéutica anunció que su vacuna tenía un 90% de eficacia. Una semana después, la segunda elevó la eficacia hasta el 94,5% y en diciembre, Estados Unidos, Reino Unido y la Unión Europea comenzaron a administrar las primeras dosis.
Un descubrimiento que no solo serviría para la creación de vacunas, sino que abre las puertas a nuevos campos de actuación, como proteínas terapéuticas o la curación de algún tipo de cáncer.
El Nobel de Medicina es el primero de la ronda de estos prestigiosos premios, a los que seguirán los anuncios en días sucesivos de los de Física, Química, Literatura, de la Paz y finalmente el de Economía, el próximo lunes.
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