El Colegio de Enfermería de Valencia ha denunciado el “agravio” que sufren las/os enfermeras/os de las residencias de mayores al ser puntuadas por su experiencia laboral en las oposiciones, frente al resto de compañeras/os de Sanidad, ya que se quedan sin opciones a la hora de lograr puntos por su trabajo.
En la última resolución, de 22 junio de 2021, se establece que cualquier trabajador de diferente categoría a enfermera/o, como celador, pero que desarrolle sus funciones en Sanidad puntúa 0,12 por mes, igual que las/os enfermeras/os que dependen de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas. Pero a las/os enfermeras/os se les limita la baremación hasta un máximo de 5 puntos, mientras que el resto de trabajadores de Sanidad pueden obtener un total de 50 puntos por su tiempo trabajado o experiencia.
También se detalla que un/a enfermero/a de la Consejería de Sanidad de Valencia “obtiene 0,23 por mes trabajado”. “Por los servicios prestados en la misma categoría profesional y, en su caso, especialidad (enfermera), siempre que quede acreditado que la plaza desempeñada tiene igual contenido funcional que la categoría profesional en la que se inscribe, con una puntuación de 0,12 por mes trabajado, con un máximo de 5 puntos”.
El principal problema de las enfermeras de residencias es que carecen de la consideración del personal sanitario porque no pertenecen a la Conselleria de Sanidad. Estas enfermeras están adscritas a la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas, lo que supone unas peores condiciones laborales en remuneración económica, formación, reconocimiento, desarrollo o movilidad.
Respecto a las horas trabajadas de las enfermeras de residencia dependientes de Igualdad, les cuentan las horas de las noches igual que las horas de día, mientras que una hora nocturna en Sanidad se contabiliza como 1,25 horas a efectos de jornada anual. Al final del año, si trabajan una noche de media a la semana, han trabajado 130 horas más de jornada anual que las enfermeras de Sanidad.
Según el Colegio de Enfermería de Valencia, la Conselleria de Igualdad “ofrece unas condiciones de contratación diferentes a las de Sanidad, con menor flexibilidad y mayor burocracia”. Gran parte de las jornadas laborales que se realizan con servicios mínimos, con el desgaste físico y mental que conlleva. Además, en muchas ocasiones, los sustitutos tardan hasta 3 meses en empezar a cobrar su sueldo.
“Esta situación provoca que cada vez sea más difícil encontrar personal de Enfermería para las residencias porque son muy pocos las/os profesionales que están dispuestas/os a trabajar en los centros dependientes de la Conselleria de Igualdad y políticas inclusivas por las desigualdades en la baremación de las oposiciones y por las pésimas condiciones laborales a las que se enfrentan”, añaden desde el Colegio de Enfermería de Valencia.
“Durante los últimos años, la presión asistencial ha empeorado sin que se tomen medidas para solucionar la falta de personal, pese a las constantes reclamaciones que se llevan haciendo desde el sector sociosanitario de Enfermería para que se les equipare con sus compañeras/os de Sanidad”, concluyen.
