Sandra Golpe salió de Cádiz con la mochila cargada de ganas e ilusión de llegar a ser una gran periodista. Y aunque no fue fácil, volvería a escogerlo, porque su lema es claro “Si yo he podido, cualquiera puede, pero hay que ser perseverante y trabajador”. Lleva más de siete años dirigiendo Antena 3 Noticias 1, llegando a ser el informativo más visto en muchas ocasiones. Tiene clara la importancia y relevancia de la sanidad, de los profesionales sanitarios, por eso afirma que todos los asuntos que tengan que ver con la salud, siempre serán prioritarios en su informativo. ¡Charlamos con ella!
Pregunta. Si hacemos un repaso por su carrera, vemos que ha pasado por muchos lugares hasta conseguir su hueco. ¿Cuál es la clave?
Respuesta. Sí, muy probablemente repetiría. Lo escogí por vocación y porque asociaba el periodismo con viajar, conocer gente y mundo, escribir y, gracias a todo eso, poder salir de una introversión patológica, que me hacía infeliz en la adolescencia.
Esta profesión me ha resultado terapéutica, me ha obligado a espabilar, a buscar esos huecos profesionales a base de arrojo y dedicación absoluta. ¡Era todo lo que podía ofrecer! Soy la única periodista de mi familia.
A finales de los 90, yo era una chica de Cádiz en Madrid, buscando una oportunidad para llegar a fin de mes. Entrar en la rueda laboral me resultó complicado, como a tantos colegas. Una carrera de fondo que, por muchos años que le eches, no sabes a dónde te llevará. Hay que quitarse la vergüenza y el miedo de encima, apostar por una misma ante los demás. La ilusión y la pasión por el trabajo, el que sea que consigas, marca la diferencia y abre puertas hacia destinos mejores.
Siempre se lo digo a mis alumnos: “Si yo pude, cualquiera puede. Ahora bien, hay que ser perseverante, trabajador/a”.
P. Desde el 2017 dirige y presenta Antena 3 Noticias de lunes a viernes, ¿qué tal el cambio? ¿Hay dificultad de ver ese puesto en una mujer?
R. Llevo ya siete años dirigiendo Antena 3 Noticias 1 y, objetivamente, el balance es impresionante. Somos el informativo más visto de todas las teles, y eso que no estamos ubicados en el prime time. ¡Más alto no se puede llegar!
Hemos hecho historia, estoy muy orgullosa de mi equipo, de todo lo que hemos logrado juntos. Los espectadores nos respaldan y solo ellos me quitan el sueño, porque no quiero defraudarles. En la tele nos ponen nota cada día, la presión es inevitable, vivo con ella a cuestas.
Por otro lado, ser mujer y dirigir el formato que presentas, todavía hoy, no resulta común en España, y eso que las redacciones son mayoritariamente femeninas. No te voy a decir que se ha erradicado el machismo laboral, porque te estaría mintiendo. Vamos evolucionando, sí, pero queda camino.
Dirigir implica, en mi caso, buscar más el prestigio que la fama y ser generosa. Pensar más en el informativo que en mí misma. Saber ceder ante otros razonamientos y saber potenciar el talento que te rodea, yo lo concibo así. No busco tanto brillar como hacer un producto brillante, riguroso, entretenido.
P. Sois en muchas ocasiones lo más visto de la televisión. En tu opinión, ¿qué tiene que tener un espacio/programa para que llegue a ese nivel?
R. Debe tener mucha pasión detrás. Un equipo ambicioso, en el buen sentido, también motivado y exigente con su trabajo; un guion dinámico; chispazos de creatividad; un lenguaje directo y comprensible; estar siempre donde se produce la noticia, a ser posible los primeros; buscar informaciones en exclusiva… Al final, cuando las cosas se hacen con cariño, logras ganarte al espectador.
P. ¿Cuál ha sido la noticia que más te ha costado dar? ¿Y la más bonita que recuerdes?
R. Las bonitas las buscamos a diario, tenemos una sección de “la buena noticia del día” al final de cada informativo, que nos reconcilia con la humanidad. Afortunadamente, mi memoria flaquea. Si tuviera que guardar todas las malas noticias que suceden, ¡me habría vuelto loca! Llevo ya muchos años informando. No olvido los atentados de ETA que me tocó contar, tampoco el 11S o el 11M… Los crímenes con niños involucrados me descomponen. Y las guerras, que les tienen a ellos como principales víctimas. En esta última oleada, en Oriente Próximo, la mayoría de los fallecidos son menores.
P. La manera de dar noticias ha cambiado mucho. Con la aparición de Internet y las redes sociales todo el mundo puede hacer eco de algo que sea noticia, y quizás haya “el triple” de hechos noticiosos en un día en comparación con hace 20 años. ¿Cómo seleccionar y dar prioridad?
R. En la pantalla informativa, por fin, las mujeres estamos dejando de ser el florero que acompaña al comunicador. Somos tan buenas o mejores que ellos, lo mismo que en otras disciplinas.
Yo siempre he defendido el lenguaje de la naturalidad. Sin renunciar al rigor en los datos, por supuesto. Y he procurado llevarla siempre a la pantalla, conmigo misma y con mis compañeros “expertos” a los que hago hueco en el informativo. Sin naturalidad, no traspasas la pantalla, eres lineal, intrascendente.
Internet nació cuando yo aún estaba en la facultad. Digamos que me ha acompañado desde sus inicios, ¡hemos crecido juntos! En cambio, la irrupción de la Inteligencia Artificial me pilla al borde de los 50. Tenemos todos que ponernos las pilas, porque va a tener efectos globales, en todas las empresas.
Sobre el contenido del informativo: Hay asuntos que sabes desde el principio que “deben” estar en tu guión. El dato del paro, unas inundaciones serias, un hecho político relevante… Todo eso que vas a ver en el resto de los medios lo verás con nosotros, por supuesto. Verás hechos verificados y contrastados, algo que no puedes conseguir muchas veces en las redes sociales. Y luego, ofrecemos ese “plus” de noticias propias, que sabemos que interesan en la calle. Problemas sociales y económicos, que hablas con tus amigos, con tu entorno. Pretendo que las noticias conecten con la realidad colectiva, y servirnos de las tecnologías para hacerlas más amenas y atractivas.
P. Los temas de salud a veces son complicados de abarcar y tratar. ¿Cree que la labor de los profesionales sanitarios, y en concreto de los enfermeros, es importante?
R. Es CRUCIAL, os lo escribo con mayúsculas. Para mí, sois y seréis siempre los profesionales más valiosos, los más necesarios de la sociedad. Salváis vidas, nada más y nada menos. Nos cuidáis… Me enfada pensar que no seáis los mejor pagados, que muchas veces tengáis que emigrar a otros países, en busca de mejores condiciones laborales.
En el informativo de las 15:00 horas tenemos en cuenta vuestras reivindicaciones y se expone, cada dos por tres, el problema de la escasez de sanitarios, de las listas de espera… Yo sé lo importante que es vuestra labor de primera mano: mi madre, de joven, fue enfermera. ¡Nunca ha dejado de serlo, en realidad! Su sueño habría sido que uno de sus hijos se hubiera dedicado a la Medicina o a la Enfermería. ¡De momento, no ha tenido suerte! A ver qué pasa con su nieta pequeña.
Todos los asuntos que tienen que ver con la salud, incluidos los avances científicos, son prioritarios en mi informativo.
P. ¿Recuerda alguna anécdota con alguno de ellos?
R. Algunas de mis mejores amigas son sanitarias, con ellas tengo muchísimas vivencias y anécdotas. En general, los/as enfermeras/os suelen despuntar en los hospitales por su cercanía con los pacientes. Ese factor humano es impagable cuando estás sufriendo. Y es el recuerdo que te llevas.
Gracias a varias de estas amigas, pude estar informada antes que nadie de la situación en los hospitales cuando nos asoló la pandemia. Ellas me ayudaban a hacer cada día el mejor espacio de noticias posible. Fuimos, de hecho, lo más visto de la tele en España durante aquellos meses oscuros, con todo el mundo confinado.
P. Uno de los momentos más complicados a nivel de salud fue la época del covid, en la que tú no te podías quedar en casa para trabajar. ¿Cómo recuerdas aquella época?
R. Ahora lo pienso, con cierta perspectiva, y parece que hayamos sido todos personajes de una peli de terror. Yo no podía “no ir”, porque había que sacar adelante aquello cada día. Se dividió a la redacción en dos: una mitad trabajaba presencialmente y la otra, desde su casa.
Cada quince días rotaban. Muy complicado todo en la práctica, pero para hacer buen periodismo hay que estar en los lugares que son noticia… Tuvimos que recurrir a las entrevistas y conexiones vía Skype… que han venido para quedarse. Lo mismo que el teletrabajo. ¡Yo no lo recomiendo en nuestro oficio, ni en el vuestro!
Aparte de trabajar el doble, con menos gente, durante aquellos meses me lo hacía todo: me vestía, maquillaba y peinaba como podía… Hicimos lo que pudimos. ¡Fue una época de aprendizaje y resiliencia!
P. La vida da muchas vueltas… ¿dónde veremos a Sandra en un futuro? ¿Algún proyecto en mente?
R. La vida hay que exprimirla. Cuando algo funciona muy bien, no se toca, no lo tocan. Lo comprendo y lo agradezco, aunque siempre estoy dispuesta a más, a crecer, a aprender… Sería maravilloso combinar lo que hago ahora, que va sobre ruedas, con otros cometidos. ¡Ya veremos!
PÍLDORA
- ¿Cómo definiría la labor enfermera? Esencial.
- ¿Qué no falta nunca en su botiquín? Zomig® (sufro migrañas)
- Ejercicio, ¿en un gimnasio o al aire libre?¡Afuera!
- ¿De qué alimento no podría prescindir? Pan.
- De no haber sido periodista, ¿qué profesión habría escogido? Estoy donde tenía que estar 🙂
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