La tarjeta sanitaria va a cambiar. El Consejo de Ministros ya aprobó una modificación del Real Decreto que regula la Tarjeta Sanitaria Individual en el Sistema Nacional de Salud. El objetivo de esta actualización es mejorar las características, como realizar un formato virtual para todas las comunidades autónomas, además del formato físico que ya existe.
Estos cambios que se van a realizar buscan facilitar, cada día más, el acceso de las personas a los servicios sanitarios, especialmente cuando una persona se traslada de comunidad autónoma o cuando ocurre una emergencia o pérdida de la tarjeta física. Además, según explican desde el Ministerio de Sanidad, “también evitará la necesidad de llevar la tarjeta física para acceder a la atención sanitaria en cualquier centro del SNS y disminuirá los costes asociados a la impresión y distribución de tarjetas físicas, contribuyendo a la sostenibilidad del sistema”.
Actualmente, la tarjeta sanitaria clásica ya identifica al paciente en cualquier dispositivo del SNS y en cualquier oficina de farmacia de España. Una interoperabilidad que se mantendrá y reforzará. Con el formato virtual se agilizará, además, el desarrollo de servicios digitales entre los servicios de salud de las comunidades autónomas.
Principales cambios de la Tarjeta Sanitaria Individual
Entre los cambios principales estarán la virtualización, accesibilidad, así como que sea efectiva en todas las comunidades autónomas:
- Emisión en soporte virtual: se permitirá la emisión de la TSI tanto en soporte físico como virtual, o en ambos, ofreciendo flexibilidad a las personas y adaptándose a sus preferencias. La TSI virtual podrá sustituir completamente a la física solo si el titular así lo desea.
- Datos obligatorios y adicionales: se especifican los datos básicos obligatorios que deben incluirse en la TSI, tanto física como virtual, garantizando la identificación inequívoca del titular y su derecho a la asistencia sanitaria. Además, se enumeran datos adicionales que podrán ser incorporados, como información de contacto de emergencias.
- Accesibilidad: se establece la necesidad de adaptar la TSI a las personas con discapacidad, asegurando la igualdad de acceso a los servicios sanitarios para todos los ciudadanos. Asimismo, se regulan las características técnicas de la banda magnética y el código QR para garantizar su lectura en todo el territorio nacional, facilitando la interoperabilidad y evitando barreras administrativas.
- Validez en todo el SNS: la TSI, en soporte virtual, será válida en todo el SNS, como ya lo es en soporte físico y permitirá el acceso a los centros y servicios sanitarios.
- Plazo de adaptación: se establece un plazo de 18 meses para que las autoridades sanitarias y los agentes implicados en la provisión de asistencia sanitaria se adapten a los nuevos requisitos.