Rafael Muñoz, enfermero del Hospital de Montilla, ubicado en Córdoba, junto con el médico intensivista José Antonio Guzmán y el fisioterapeuta Javier Flores, ha acompañado a los pacientes de la Unidad de Rehabilitación Cardiaca del centro, y a sus familiares, en la sexta edición de la ruta senderista “Corazón Sano”. 
En la iniciativa de este año, informan desde la Agencia sanitaria Alto Guadalquivir en un comunicado, han participado un total de 35 afectados y allegados, acompañados por los profesionales mencionados, que han completado un recorrido de diez kilómetros y han recibido, de forma previa, una charla de una antigua paciente de los servicios de rehabilitación, denominada “Mi historia. Mi historia clínica”, sobre sus experiencias a raíz de su cardiopatía.
De esta forma, el propósito de esta actividad pasa por que constituya un punto de encuentro y de motivación para los participantes y el personal sanitario a su cargo, convirtiéndose en un espacio en el que puedan compartir sus vivencias. Y, por otra parte, se pretende poner de manifiesto la evolución favorable de los pacientes que recientemente han sufrido un episodio agudo de dolencia cardiaca, principalmente, el infarto.
En este sentido, los trabajadores del hospital han querido destacar, según recogen en la citada nota informativa, que “la recuperación física de estos pacientes, que actualmente les permite llevar a cabo una actividad como la del senderismo, se ha producido gracias al cambio de hábitos que han llevado a cabo en sus vidas a raíz de la enfermedad, y con ayuda de los profesionales sanitarios implicados en su atención”.
Así, otro de los objetivos de este proyecto, que alcanza, como se ha dicho, su sexta edición, es promover la actividad física responsable y adaptada a las necesidades de cada paciente, además de fomentar la adherencia a las pautas sobre prevención para evitar la aparición de un posible episodio cardiaco.
La Unidad de Rehabilitación Cardiaca del Hospital de Montilla, puesta en marcha en el año 2011, está conformada por un enfermero, un fisioterapeuta, un médico rehabilitador y dos cardiólogos, que llevan a cabo sesiones individuales, en las que se tratan aspectos como la valoración enfermera inicial, la exposición de los síntomas de alarma, el abordaje de los factores de riesgo, y grupales de ejercicio con los afectados, y cuenta con diversos recursos, como dos cicloergómetros, una cinta para correr y andar, una central de monitorización cardiaca con tres puestos y un carro de resucitación cardiopulmonar con desfibrilador.
