Hace unos años el tren de la humanización cobró protagonismo, gracias a Gabi Heras y al Proyecto HUCI, y no solo en España sino también fuera de nuestras fronteras. Los que llevamos un tiempo ocupándonos de dar visibilidad al lado más humano de nuestro trabajo acogimos con entusiasmo esta corriente. Era algo necesario, pesara a quien pesara. 
La «H» comenzó a inundar el sistema de salud, y mucha gente se acercó a ella para escuchar propuestas, reflexiones y argumentos para poner de nuevo en alza unos valores que en ocasiones se creían intrínsecos en nuestra profesión, pero que por múltiples motivos se fueron perdiendo.
Un sueño hecho realidad. Profesionales, pacientes, familiares y gestores unidos por un objetivo: colocar de nuevo al paciente en el centro del sistema. Y esta bendita locura creció, explosionó y se posicionó en el mundo de la sanidad. Ahora en su máximo apogeo, lastimosamente compruebo que a este tren de la humanización poco a poco se van sumando personas con diferentes intereses.
Si al principio se intentó politizar la «H» como un producto perfecto para lavar imagen de consejerías y gerencias, ahora veo que son algunos profesionales los interesados en subirse a este tren con meros objetivos personales. Las voces en contra de la «H» están esperando cualquier tropiezo para alzarse con cualquier chascarrillo tuitero o el clásico «eso ya lo hacemos nosotros desde hace años».
Tal vez sea el momento de replantearse a dónde queremos llegar, qué se hizo bien y qué estamos haciendo mal. Estudiar si determinadas acciones que se engloban dentro de este movimiento son realmente eso o sencillamente un simple postureo.
El próximo mes de abril, en Murcia, tendrá lugar el I Congreso Internacional de Humanización en Urgencias, Emergencias y Catástrofes del Proyecto HURGE, un sueño que me ilusiona, pero conlleva una gran responsabilidad, porque aquí se marcará la dirección que queremos que lleve este tren de la humanización en urgencias.
El 19 y 20 de Abril profesionales, pacientes, gestores e interesados del mundo de las Urgencias y Emergencias dictarán el camino a seguir. Con tinta de médico estará presente, pero esta vez dejando un lado la marca y cobrando un inesperado protagonismo la persona.
No faltéis, la «H» os necesita.
J.M. Salas – Con tinta de médico
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