El Servicio de Oncología y Hematología Clínica del Hospital Universitario de Fuenlabrada, ubicado en la Comunidad de Madrid, cuenta con una consulta especializada en pacientes hematológicos de alta complejidad, al cargo de enfermeras en coordinación con los hematólogos, en la que se atiende a las personas que, en general, están inmunodeprimidas, con lo que requieren atención y cuidados frecuentes y un tratamiento con un alto nivel de especialización, como portadores de catéteres Hickman, controles analíticos constantes, trasfusiones, factores hemopoyéticos o profilaxis antibiótica.
Así, según lo expuesto por el propio centro en una nota de prensa, se trata de afectados de enfermedades hematológicas graves, como leucemias agudas o linfomas y mielomas en el periodo pretrasplante o postrasplante inmediato; dada la complejidad de dichas patologías, se trata de pacientes que necesitan tratamientos intensivos y, por lo tanto, largos periodos de hospitalización.
De esta forma, la actividad asistencial del personal de la consulta para pacientes hematológicos de alta complejidad se orienta a la extracción de analíticas, los cuidados de catéteres, la asistencia clínica, la gestión de pruebas pretrasplante y preingreso, la administración de tratamientos y el soporte transfusional, la realización de pruebas invasivas como el aspirado medular y la punción lumbar, el seguimiento telefónico de pacientes dados de alta y la educación sanitaria. Desde la puesta en marcha de esta unidad, en el año 2019, se ha atendido a un total de 1.025 pacientes hematológicos de alta complejidad, y, además, se han llevado a cabo 3.823 procedimientos.
Pilar Bravo, hematóloga responsable de la consulta, ha querido poner de manifiesto, en el mencionado comunicado, que con este servicio se persigue el objetivo del “control estrecho de pacientes con patologías complejas que requieren cuidados con alto nivel de especialización y la detección precoz de complicaciones que puede evitar visitas a urgencias e ingresos hospitalarios. Además, permite la administración ambulante de tratamientos y soporte transfusional de forma programada, que puede reducir la estancia media de algunos ingresos”.
La puesta en marcha de la consulta para pacientes hematológicos de alta complejidad facilita a los pacientes evitar visitas a urgencias e ingresos hospitalarios y, dado el caso de ser necesario, pueden ingresar directamente en el hospital, con lo que se agiliza el circuito de asistencia sanitaria. En este sentido, las personas tienen la posibilidad de contactar por teléfono con el personal de la consulta para plantear cualquier incidencia, resolver sus dudas y gestionar las pruebas previas al trasplante de forma más rápida. Además, los profesionales trabajan para coordinar las citas y agruparlas en un solo día, para reducir las visitas al centro.
Bravo ha destacado, por otra parte, que en lo referente a la esfera emocional, “al tratarse de pacientes con procesos e ingresos prolongados en los que establecen un vínculo estrecho con el personal de la planta, en el momento del alta se les proporciona una continuidad de atención en un entorno que, para ellos, es ya conocido, en el que se sienten arropados y, de alguna manera, parte de la familia”. Para ello, los trabajadores proporcionan a los afectados, desde la primera visita, la educación sanitaria necesaria para facilitar el cumplimiento de los tratamientos y las pautas de autocuidado.
Por otra parte, inciden desde el Hospital Universitario de Fuenlabrada, a pesar de la situación actual a raíz de la COVID-19, la consulta ha continuado con su funcionamiento normal para prestar la asistencia especializada que precisan los pacientes hematológicos de alta complejidad.
