Alberto García Sanz vivió varias experiencias fuera de España hasta llegar a Sídney. Las escasas oportunidades laborales que le ofrecían en España hicieron que quisiera probar suerte en el extranjero y, aunque pasó por Suecia e Irlanda, actualmente está a más de 17.000 km de su casa, en Sídney (Australia), trabajando como enfermero en el servicio de Urgencias del Hospital Royal Prince Alfred, una experiencia que está disfrutando y que espera que no termine pronto.
Pregunta. ¿Qué llevó a Alberto a estudiar Enfermería?
Respuesta. Nunca tuve muy claro a que me quería dedicar por aquellos años cuando estudiaba en el instituto, pero llegado el momento de elegir estaba entre Medicina y Enfermería. Me quedé a las puertas de ser admitido en Medicina así que opté por Enfermería, cursé el primer año, me preparé selectividad a la vez y conseguí plaza en una universidad para hace Medicina, pero me había gustado tanto ese primer año y las cosas que se venían por venir que decidí quedarme. Doy gracias por aquel momento que al final me ha llevado tan lejos, no sólo de lugar sino a nivel profesional y personal.
P. ¿Por qué eligió irse fuera de España?
R. En 2014 estuve de Erasmus en Suecia y tras esta experiencia nada fue igual. He de decir que siempre tuve las ideas relativamente claras, siempre supe que quería irme a vivir al extranjero y disfrutar de la experiencia, al fin y al cabo, mi casa siempre estará allí cuando la necesite.
Tras el intercambio de 2014, conocí a tanta gente que se iba fuera y que tenían vida en otros países que, a pesar de estar en tercer año, ya prácticamente decidí que al terminar probaría suerte en el extranjero.
Además de todo esto, por aquel entonces en Andalucía no se ofrecían contratos con mis puntos, mi futuro era trabajar solo en verano, Navidad y Semana Santa e ir compaginando con una privada que paga muy mal. Las condiciones eran pésimas y, desgraciadamente, al haber visto algo mejor, no pretendía conformarme con nada.
P. Primero fue a Irlanda donde estuvo cinco años, y después se marchó a Sídney (Australia), donde lleva ya un año. ¿Qué le llamaba de un país tan lejano de casa?
R. Así es, al acabar la carrera junto con unos amigos sopesamos la idea de irnos a Reino Unido, pero en aquel entonces justo comenzó el Brexit y las medidas para colegiarse se pusieron más duras. Sin embargo, Irlanda ofrecía prácticamente lo mismo, pero algo más sencillo, así que hicimos las maletas y nos fuimos a Dublín.
Una vez allí, a lo largo de los años conoces a muchos compañeros irlandeses, muchos de ellos iban o venían de Australia. Para ellos es relativamente sencillo registrarse en Australia y el sistema de trabajo es prácticamente igual.
Poco a poco fui descubriendo sus experiencias, sus pros (más dinero, menos carga de trabajo, más plantilla, mejor progresión, más oportunidades, etc.) y sus contras (tan lejos que necesitas entre dos y tres vuelos, ambiente nuevo, sin conocer a nadie).
Siempre he sido un poco “culo inquieto” y la posibilidad de ir a Australia, ya no solo como turista sino como profesional, me daba la excusa perfecta para que mi pareja y yo diésemos el salto y así poder disfrutar de una experiencia irrepetible.
P. ¿Es difícil trabajar en la sanidad de Sídney? ¿Cuáles son los pasos a seguir?
R. Aquí a la sanidad se le conoce como Medicare. Es un sistema de salud muy parecido al español, goza de buena reputación internacional, pero al final con las mismas carencias que cualquier otro en el mundo. El aumento de la demanda para unos recursos limitados supone una carga de trabajo alta en muchas ocasiones, aunque en ningún momento como Irlanda o España.
Es más, suelo bromear con mis compañeros que trabajar en Australia son unas vacaciones para mí. No resulta difícil trabajar en la sanidad australiana, lo más complejo es el registro de Enfermería. Para trabajar en la sanidad tan solo tienes que solicitar el empleo que se oferta, por ejemplo, Enfermero en la Planta de Oncología a tiempo completo, haces una entrevista y listo, normalmente te contratan, necesitan de mucha gente. Es más, es tan sencillo que puedes preguntar si te dan el puesto a tiempo completo o a tiempo parcial o si hay otro puesto en otro servicio o planta en caso de que la oncología no sea lo tuyo.
P. ¿En qué se diferencia el sistema sanitario de Australia del español?
R. Son ambos muy similares, cubren gran parte de los servicios, a excepción del dentista y poco más. Ambos son públicos y no hay que pagar nada si tienes Medicare. El servicio en sí es muy parecido, pero las diferencias principales se encuentran en la plantilla y los trabajos que proporciona.
Tu contrato de trabajo depende obviamente de tu visado, pero si eres residente permanente o ciudadano es indefinido. Para los enfermeros es muy sencillo venirse aquí con trabajo y continuar trabajando donde quieras, cuando quieras y hasta que quieras. Hay un montón de gente contratada por turnos, lo cual hace que el trabajo sea más sencillo, además de la posibilidad de hacer turnos extras al quedarte al finalizar tu jornada cobrando el doble de lo que lo harías normalmente.
El principal problema que tienen aquí es que necesitan gente y no pueden conseguirla lo suficientemente rápido de lo que lo precisan.
P. Cuéntenos su experiencia, ¿dónde está ahora y cómo es poder trabajar como enfermero allí?
R. Mi experiencia por ahora aquí ha sido inmejorable. Vine buscando un salto de calidad, no solo económico, sino también profesional y lo he encontrado sin duda.
La gente es muy amable, muy abierta y amigable, la carga de trabajo es diez veces menor que en Irlanda, no solo me pagan relativamente bien (Australia no deja de ser un país muy caro), sino que me dan la posibilidad de que si quiero ganar más este mes, puedo.
Tengo mi contrato indefinido, con mis seis semanas de vacaciones. Trabajo en un turno rotatorio de mañanas, tardes y noches, pero tengo la posibilidad de cambiar turnos por si me surge algo en concreto.
Ahora mismo me desempeño como enfermero en el servicio de urgencias del Hospital Royal Prince Alfred en Sídney. Es el hospital más importante de mi estado, Nueva Gales del Sur (NSW) y de Sídney.
En el ámbito profesional tengo experiencia prácticamente en todo lo que es posible en urgencias, aun así, nos forman todos los días con 45 minutos en el turno de tarde donde dan charlas y presentaciones sobre temas actuales. Te desarrollan un plan personal para que progreses en el departamento y así te puedan acreditar a trabajar en emergencias pediátricas, críticos o triaje.
P. ¿Recomendarías salir a trabajar como enfermero al extranjero, aunque sea para vivir la experiencia?
R. Sin ninguna duda. La experiencia de vivir fuera es incalculable, ya sea unos meses, un año o 10.
Para mí a pesar de llevar ya 6 casi 7 años fuera cada día aprendo algo nuevo y me interesa algo distinto, así es como empecé en Irlanda y acabé aquí.
Ya no sólo a nivel profesional de enfermería creces y pruebas cosas nuevas, pero a nivel personal también.
P. Ahora que lleva un tiempo en Sídney, ¿qué consejos le daría a un compañero que decida buscar trabajo de enfermero fuera de España?
R. Mi mejor consejo es que no le de miedo el salir de su zona de confort. Es una decisión difícil en la que cambias todo de repente a tu alrededor por algo completamente nuevo. No solo el país y la ciudad, también el modo de trabajar, el idioma, las costumbres. El idioma puede ser intimidante al principio, pero al final la práctica y las ganas pueden con todo.
P. ¿Dónde veremos a Alberto en un futuro? ¿Volverá a España?
R. Por ahora creo que no. De momento estoy muy a gusto aquí con mi pareja y mi gato y no creo que volvamos a cambiar de país, quizás de ciudad quién sabe. Visto lo visto, nunca digas nunca, pero creo que aquí en Sídney me quedan otros tres o cuatro años o quien sabe si más.
España siempre está dentro de mis planes cuando se trata de mudarme, aunque sea al final de mi calle, pero lo considero una opción que siempre voy a tener ahí, así que por ahora mejor disfrutar de esta oportunidad de vivir y disfrutar Australia que muchas veces solo pasa una vez en la vida.
REQUISITOS PARA TRABAJAR COMO ENFERMERA EN AUSTRALIA:
- Documentación: pasaporte, DNI, contrato de trabajo, certificado de notas.
- Solicitud de empleo: certificado de estar colegiado.
- Homologación del título: para poder ejercer la profesión enfermera es preciso documentar la posesión del título de Enfermería.
- Nivel de idioma: inglés IELTS 7.0.
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