Estados Unidos ha formalizado su decisión de salir definitivamente de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Hace unos días anunciaban que comenzaban el proceso para sacar al país de la institución y que se hará efectivo dentro de un año.

Al parecer, no se han dado detalles de su retirada, pero si se conoce que su presidente, Donald Trump, llevaba desde mayo anunciando su decisión de salir de la organización acusando a la OMS de haber gestionado mal la pandemia sanitaria por el Covid-19 al creer en exceso las informaciones aportadas por China, y de estar bajo el «completo control» del gigante asiático, al que pretende sancionar.
El portavoz del secretario general de la ONU, António Guterres, confirmó en un comunicado que recibió la notificación este lunes, y que ahora está «en el proceso de verificar con la OMS si se cumplen todas las condiciones para la retirada». Cuando se sumó a la OMS en 1948, Estados Unidos impuso «ciertas condiciones para su posible retirada», que incluyen una notificación previa de un año y «el cumplimiento total con el pago de sus obligaciones financieras», explicó el portavoz de Guterres, Stéphane Dujarric.
El hecho de que la medida no se haga efectiva hasta dentro de un año significa, además, que la retirada de Estados Unidos podría detenerse si Trump pierde las elecciones presidenciales de noviembre y su sucesor así lo decide. «Lo que se haga ahora puede cancelarse el año que viene, porque no será definitivo», aseguró un diplomático de la ONU, que pidió el anonimato, a la cadena televisiva CNN.